En respuesta al editorial publicado este viernes 15 de febrero por el periódico estadounidense The Washington Post, bajo el título de «La fanfarronada del señor Chávez», el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela afirmó que si la nación del Norte dejara de recibir 1 por ciento del petróleo que importa, sufriría un terremoto político y económico.
A su juicio, si fuera verdad que para Estados Unidos no es necesario el petróleo venezolano, desde hace mucho tiempo hubieran procedido a ejecutar un boicot contra la industria petrolera del país bolivariano. «Valdría la pena retarlos: ¡atrévanse!», enfatizó.
El texto difundido dice textualmente que «si el hombre fuerte de Venezuela corta sus exportaciones de crudo a Estados Unidos, la primera víctima sería su régimen», por lo que el Jefe de Estado venezolano aseveró que es precisamente la posición asumida por el diario la que constituye una fanfarronada. «Es la fanfarronada del Washington Post», acotó el Presidente Chávez.
Dijo que a nuestro petróleo le sobran compradores y que es totalmente falso que nuestro producto sólo se pueda colocar en el mercado estadounidense. En tal sentido recordó que la llamada «Apertura petrolera» se montó sobre la base de mecanismos coloniales, según los cuales la única opción era venderle a Estados Unidos, y a precios muy bajos.
Como ejemplo de tal afirmación expresó que China ha incrementado su demanda de petróleo a Venezuela y resaltó la reciente firma de un convenio con Portugal, para enviar hidrocarburos.
Recordó también la satisfacción manifestada recientemente por el embajador de Japón, dado que por primera vez en la historia la nación asiática recibió un barco con petróleo venezolano. Indicó el Presidente Chávez que Japón se sitúa como el segundo consumidor de petróleo en el mundo, después de Estados Unidos.
