Colombia fue el cuarto país de América que más invirtió en gasto militar, según el reciente informe del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo. Si el país redujera en el 2017 una cuarta parte lo que gastó militarmente en el 2015, quedarían “libres†6,76 billones de pesos, aproximadamente el 93 % de lo que se espera recaudar con la reforma tributaria.
1,663 billones de dólares (más de 4.900 billones de pesos) fue el total del gasto militar de los países del mundo en el 2015, según reveló el más reciente informe del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI, por sus siglas en inglés). Para dimensionar la cifra, basta decir que equivale a multiplicar por 6 el valor de toda la producción de bienes y servicios en Colombia durante 2015, la cual fue de 800,85 billones de pesos, y sumarle 114 billones de pesos más.
Los 10 países que más gasto militar tuvieron en el 2015 en comparación con Colombia
Estados Unidos fue el país que más gastó. La potencia del norte invirtió 596.024 millones de dólares (unos 1.633 billones de pesos al cambio de la época), una cifra astronómica si se compara con el del resto de naciones: si se suma lo que invirtieron China, Arabia Saudí, Rusia, el Reino Unido, India, Francia y Japón, otros de los países que están en el ‘top’ 10, quedarían faltando cerca de 30.000 millones de dólares para igualar al país norteamericano
Sin embargo, de los 10 países que más gastaron militarmente en el 2015 solo China y Arabia Saudí aumentaron su inversión con relación al 2014. Lo anterior demuestra, según referenció en el diario ‘El Mundo’ de España, Pere Ortega, analista español en temas de paz, que mientras potencias como Estados Unidos y sus socios de Europa Occidental reducen el gasto militar mediante la disminución del número de sus fuerzas armadas y la compra de nuevas tecnologías militares más económicas (por ejemplo, drones), potencias emergentes como China le siguen apostando a aumentar su poderío militar.
Colombia recién aparece en el puesto 23. El país invirtió 9.871 millones de dólares (unos 27 billones de pesos), lo que lo convierte en el cuarto país de América (detrás de Estados Unidos y Canadá) y el segundo de Suramérica que más gasta, solo superado por Brasil.
Gasto militar por habitante y relacionado con el PIB: ‘Top’ 10 y comparación con Colombia
El informe también compara el gasto con la cantidad de habitantes y el Producto Interno Bruto (PIB) de cada país. Los tres países que más gastan por habitante son naciones de oriente medio: Arabia Saudí, Omán e Israel, en ese orden. En el caso de Suramérica, Colombia ocupa el tercer lugar (205 dólares –561.029 pesos en el 2015– por habitante), detrás de Uruguay (282 dólares –772.665 pesos –) y Chile (256 dólares –701.426 pesos). Llama la atención el caso uruguayo, pues aunque su gasto militar total es de los más bajos del subcontinente (solo supera a Bolivia), si tuviera los mismos habitantes que Colombia, gastaría militarmente más que países como Irán, Iraq o el mismo Colombia.
En relación con el Producto Interno Bruto, Omán es el país que más invierte en gasto militar: este rubro equivale a casi una quinta parte del PIB (16,2 %), aunque el SIPRI advierte que su información es altamente incierta, porque la cifra que aparece es la que el gobierno entrega sobre inversión en defensa nacional y seguridad, pero desde 2011 esta cantidad ha aumentado en el trascurso del año, porque ya se hacen adiciones al presupuesto para compra de armamento. Hasta el momento del informe, se desconocía si en el 2015 hubo adiciones.
Le siguen Sudán del Sur (13,8 % del PIB) y Arabia Saudí (13,7 % del PIB). Aunque lejos de estas naciones, Colombia se destaca por ser el país de toda América que más gasta militarmente en relación con el PIB (3,5 %), ubicándose incluso por encima de Estados Unidos (3,2 %).
En 15 años, el gasto militar en Colombia se ha incrementado más del 400 %
En el país, el gasto militar ha crecido constantemente en lo que va corrido del siglo XXI, ubicándose el mayor aumento en el periodo comprendido entre 2007 y 2009, durante el gobierno de Álvaro Uribe. Este aumento se dio después del anuncio en el 2006 del entonces presidente, quien dio inicio a la llamada “fase de consolidación de la Seguridad Democráticaâ€, con lo que buscaba “someter†a los grupos al margen de la ley. Curiosamente, según cifras del Centro de Memoria histórica, también entre el 2007 y el 2009 se presentó un leve aumento en las cifras de víctimas de grupos paramilitares, la cual venía descendiendo desde 2003.
Para el 2015, según el SIPRI, el Gobierno Nacional invirtió poco más de 27 billones de pesos. En total, desde que Juan Manuel Santos asumió el mandato (agosto de 2010) hasta el año anterior, se han invertido 122,4 billones de pesos, y en cada año el valor ha aumentado. Cabe resaltar que aunque una parte del informe muestra un descenso del gasto entre 2014 y 2015, esta variación sólo se observa cuando se transforma el valor a dólares.
Si se analiza el presupuesto nacional para el 2015, según los datos que reveló en su momento el Ministerio de Hacienda, el único sector que estuvo por encima de ese valor fue educación, que recibió 28,93 billones de pesos. Trabajo recibió 500.000 millones de pesos menos, salud y protección social estuvo casi 10 billones de pesos por debajo y el presupuesto para ciencia y tecnología apenas equivale al 1,4 % de todo lo que se llevó el gasto militar.
¿Qué se podría invertir si se redujera el gasto militar?
En varias ocasiones se ha hablado de lo que le cuesta al país mantener la guerra con los grupos armados. Como ejercicio, si el país redujera en el 2017 una cuarta parte lo que gastó militarmente en el 2015, quedarían “libres†6,76 billones de pesos, aproximadamente el 93 % de lo que se espera recaudar con la reforma tributaria.
Si la reducción fuera de la mitad, es decir, el presupuesto quedará en 13,52 billones de pesos, se podría igualar el presupuesto de salud al de educación, duplicar el presupuesto de ciencia y tecnología y sobraría dinero suficiente para construir en un año: un proyecto similar al del túnel de la línea, 60 megacolegios y 10.000 viviendas de interés social.
Sin embargo, el amplio presupuesto militar se ha justificado con la política de seguridad y la lucha contra los grupos al margen de la ley. Por tanto, mientras se mantenga el conflicto armado, las casas, los colegios, los hospitales y las carreteras quedarán solo en el papel.
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El Tiempo