La gira de Tillerson, a pesar de la matriz de su fracaso en el objetivo que se planteó, tuvo éxito en impedir la firma del pre-acuerdo en el diálogo de Dominicana, en eliminar las nuevas sanciones a funcionarios del estado, en suspender la amenaza de embargo petrolero, la incitación a la FANB para sacar a Maduro de la presidencia, en la agudización del bloqueo económico y financiero, en la movilización de tropas del ejército colombiano hacia la frontera, en la concentración en Panamá de fuerzas militares, en impedir los ejercicios conjuntos de tropas del Brasil y Perú en la región amazónica, en opacar las declaraciones de la vocera del Kremlin apoyando a Venezuela y las últimas declaraciones groseras e injerencistas del encargado de negocios de la embajada de EUA.
Todo esto conforma un cuadro pre injerencista a todas luces.
El Directorio Cívico-militar de Venezuela debería con urgencia alertar, instruir y tomar todas las medidas pertinentes para que nuestro pueblo no sea sorprendido con una acción militar criminal relámpago tipo “Blitzkrieg“, tomándonos desprevenidos celebrando el carnaval o la semana santa.
Ojalá nunca ocurra esto, pero como decían antes “deseos no empreñaâ€.
Todd Robinson
Después de oír a este agente provocador que funge como encargado de negocios de EUA en Venezuela, en un evento similar al Carmonazo, lo menos que esperamos de nuestra cancillería es la declaración de persona no grata y la expulsión en 48 horas de nuestro país. Además de ser una medida política y ajustada al derecho internacional es un deber de nuestro gobierno para fortalecer nuestra dignidad como pueblo heredero del Libertador Simón Bolívar