ROGER CAPELLA MATEO
Un día como hoy, hace 157 años, en 1871, de gestó el más hermoso, espontáneo y original proceso revolucionario de los trabajadores en el mundo. Quizás su originalidad primigenia fue la razón que solo le permitió existir dos meses y 10 días. Hasta el 28 de mayo, pero fue tan rica la experiencia que numerosos libros de diferentes pensadores se escribieron sobre la Comuna y miles de autores a ella se han referido.
Hoy, Alejandra, mi hija, me hizo llegar un bello obsequio de un buen amigo parisino, Cyril, historiador y apasionado por el tema, un caudal inapreciable de información sobre la Comuna de Paris. Cuando lo leo, unas lágrimas no me permiten ocultar las emociones que me asaltan. Creo que todo revolucionario, más aún, que todo ser civilizado debería conocer ese hecho histórico. Mi primer encuentro, en los años 60, fue leyendo: La guerra civil en Francia, de Karl Marx.
En esos dos meses y medio escasos, se pudo implementar una serie de decretos como: todos los miembros del gobierno tendrían un salario similar al de un obrero, teniendo prohibido la acumulación y aprovechamiento propio de sus cargos. Disolver al ejército regular, sustituyéndolos por la guardia nacional democrática. La concesión de pensiones para las viudas de los guardias nacionales muertos en servicio, así como también para sus hijos. La devolución de todas las herramientas de los trabajadores a través de las casas estatales de empeño. la prescripción de las deudas y sus intereses. Se crean las guarderías para cuidar a los hijos de la mujer trabajadora. Se prohibió el trabajo nocturno. Las fábricas abandonadas por sus dueños fueron entregadas a los trabajadores por medio de cooperativas auto gestionadas. Se separó la iglesia del Estado. La educación pasó a ser laica, gratuita y obligatoria. Se dio una especial atención a la educación a la mujeres, que habían sido olvidadas hasta entonces. La bandera tricolor se reemplazó por la bandera roja. Se quemó públicamente la guillotina. Se demolió la residencia de Louis Thiers (el destituido presidente de Francia) por considerarlo un traidor a la Patria.
Una de las principales características fue la libertad. Esta libertad permitió que muchos derechista se movieran con total libertad, provocando numerosos actos de sabotaje. Solamente al final, cuando la situación se tornó difícil, se empezó a detener saboteadores y aun así no ajusticiaron más de 100.
Es de resaltar que la mujer jugó un papel muy importante en ese proceso. Desde el principio, cuando las primeras que salen de madrugada a enfrentar el ejército oficial de Francia son mujeres hasta que la multitud superó con creces a los soldados, hasta el final donde una de las principales barricadas con unas doscientos cincuenta mujeres, al frente de la conocida militante anarquista, Louis Mitchell. defienden la Comuna hasta el final.
La Comuna dejó numerosas enseñanzas. Por ejemplo, el error de haber permitido que el gobierno derrocado, al frente del cual estaba Louis Thiers, se refugiara en la emblemática ciudad y palacio de Versalles, donde pudo reunificar a su ejército y recibir del banco nacional de Francia, con sede en París y que los comuneros respetaron esa “propiedad privadaâ€, más también llegar a alianzas con los enemigos históricos de Francia, los prusianos para invadir París y destrozar los comuneros y la Comuna de París.
Nuestro proceso Bolivariano y Chavista ya casi alcanza los veinte años de lucha y presencia en la historia Venezolana, con logros inconmensurables a pesar de nuestra corta existencia, que no solo estoy refiriéndome a las viviendas, educación, salud, pensiones de vejez y tantas otras cosas, sino también a nuestro pueblo bravío y la extraordinaria dirección de Chávez y Maduro y numerosos cuadros Chavistas que han librado numerosas batallas, casi a diario, exitosas. Por muchas razones el Chavismo se ha transformado en una referencia para todos los pueblos del mundo. Pero deberíamos aprender de los comuneros que a los saboteadores y los traidores a la Patria no debemos dejarlos atentar contra nuestro pueblo y nuestra Patria. Deben tomarse medidas.
También pensar en que si hace 157 años una ciudad como París fue toda una comuna, porque nosotros, después de veinte años no lo hemos logrado?
No he oído a ningún alcalde o gobernador afirmar que se está preparando entregar su gestión donde el espacio que le corresponde gobernar lo entregará transformado en comunas. Pareciera que todos se preparan para otra elección y gobernar otro periodo. Cuando estos compañeros dicen cumplir con el legado de Chávez, será que se les “olvida†aquel mandato, claro como la luna, cuando sentenció: Comuna o nada.