Guaidó, Borges, Machado: promotores de la intervención militar contra Venezuela

Caracas, 14 Mar. AVN

Por: Yonaski Moreno/ Yuleidys Hernández Toledo

En reiteradas oportunidades dirigentes de la derecha venezolana han solicitado una «intervención militar» extranjera para derrocar al gobierno constitucional del jefe de Estado, Nicolás Maduro Moros, usando como argumento una supuesta «crisis humanitaria» en Venezuela.

Esta farsa ha contado con medios de comunicación nacionales e internacionales y la vocería del presidente de la Asamblea Nacional (AN) en desacato, Juan Guaidó, los prófugos Julio Borges Antonio Ledezma, la ultraderechista María Corina Machado y el economista neoliberal, Ricardo Hausmann.

Un día después de que la derecha intentara infructuosamente ingresar la supuesta «ayuda humanitaria» por la frontera entre Colombia y Venezuela con el apoyo de EEUU y el gobierno colombiano, Guaidó escribió un mensaje en Twitter que evidencia su plan.

«Los acontecimientos de hoy me obligan a tomar una decisión: plantear a la Comunidad Internacional de manera formal que debemos tener abiertas todas las opciones para lograr la liberación de esta Patria (…)», escribió Guaidó el 24 de febrero en la red social.

La frase «todas las opciones» es la misma que ha utilizado de modo intimidatorio el presidente estadounidense, Donald Trump, en reiteradas oportunidades para amenazar a Venezuela.

Julio Borges

Borges, quien se encuentra prófugo tras su implicación en el plan golpista continuado y el magnicidio en grado de frustración contra el presidente Nicolás Maduro en agosto de 2018, ha pedido una intervención en Venezuela.

En entrevista con The Washington Times, señaló que «es muy importante para nosotros (la oposición) que el presidente Trump sea un factor de ayuda para crear la máxima presión internacional» sobre el Gobierno de Maduro.

El 24 de febrero, el dirigente del partido de derecha Primero Justicia anunció en Twitter su reunión con los representantes del autodenominado Grupo de Lima para «exigir una escalada en la presión diplomática y en el uso de la fuerza contra la dictadura de Nicolás Maduro».

En aquella oportunidad manifestó su aspiración de «utilizar la presencia del vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, del presidente Iván Duque y de todos los cancilleres del Grupo de Lima para fijar y pedir ese paquete de acciones contundentes; lo que ha ocurrido ayer abre las puertas a una estrategia más determinante, definitiva e inmediata», cita al respecto el diario El Universal.

Antonio Ledezma

«Para rescatar a Venezuela es necesario aplicar ya intervención humanitaria y concepto de Responsabilidad de Proteger», dijo en la misma fecha otro prófugo de la justicia venezolana, Antonio Ledezma, en Twitter.

La aplicación de la doctrina de la Responsabilidad de Proteger o R2P, es el uso de la fuerza contra el país, medida que activó en 2005 la Asamblea General de la ONU cuando hay riesgo de «genocidio, crímenes de guerra, limpieza étnica y crímenes en contra de la humanidad», delitos que no ocurren en Venezuela.

En abril de 2018 Ledezma había solicitado la intervención militar, cuando aseguró desde Miami que la «injerencia humanitaria» es uno de los pocos caminos para derrocar a Maduro por parte de la comunidad internacional, cita el Diario Las Américas.

«La injerencia humanitaria se refiere a la acción de Estados u organismos internacionales contra otro Estado soberano, generalmente empleando la fuerza armada», explica este medio estadounidense en su sitio web.

María Corina Machado

El 11 de febrero, en rueda de prensa la dirigente en nombre de la alianza opositora «Soy Venezuela» pidió la «activación inmediata de la Responsabilidad de Proteger» para usar una fuerza multinacional en el intento de ingresar «ayuda humanitaria» al país.

Más tarde, se dirigió a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana con un mensaje en Twitter donde señaló: «Ciudadanos militares, entiéndanlo, el tiempo de Maduro se acabó. Aquí vamos a hacer lo que haya que hacer. No hay vuelta atrás».

La participación de Machado en acciones golpistas se remontan al plan sedicioso «La Salida» de 2014, cuando lo dirigió junto al ultraderechista Leopoldo López, del partido Voluntad Popular.

Desde entonces, ha llamado a la desobediencia civil, con especial énfasis en 2017, durante las acciones de choque y violencia callejera promovidas por la extinta Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

En abril de 2018, expresó su apoyo a los bombardeos ordenados por EEUU, Reino Unido y Francia contra Siria con la excusa de un presunto ataque con armas químicas en Duma, región de Guta Oriental, al este de Damasco, acusaciones sobre las que no hubo pruebas.

«El conflicto en Siria no distrae al mundo sobre la urgencia de la crisis venezolana, al contrario. Las fuerzas geopolíticas allí alineadas también están involucradas aquí, y con objetivos similares. El mundo democrático ha dejado claro lo que no se puede tolerar más», escribió en su cuenta @MariaCorinaYa.

Juan Requesens

El exdiputado por la AN en desacato, Juan Requesens, detenido en 2018 por facilitar el ingreso desde Colombia de Juan Carlos Monasterio Venegas, coordinador logístico del magnicidio en grado de frustración, reconoció en un foro de la Universidad de Florida el plan de la oposición para una intervención extranjera.

«Para llegar a una intervención extrajera tenemos que pasar esta etapa», dijo en referencia a las guarimbas ocurridas entre abril y julio de 2017, refirió Telesur.

Ricardo Hausmann

En enero de 2018, el ex ministro de Carlos Andrés Pérez (1989-1993) y fiel del neoliberalismo, Ricardo Hausmann llamó a la AN en desacato, a conformar un gobierno ilegítimo que convoque a EEUU y países europeos y latinoamericanos «amigos» para una intervención militar a Venezuela.

En un artículo publicado en project-syndicate.org, resalta que esta «asistencia militar» sería «semejante a la liberación de Panamá de la opresión de Manuel Noriega por parte de Estados Unidos».

Lo que no señala el ex ministro y jefe de la extinta Oficina Central de Coordinación y Planificación (Cordiplan) es que la invasión militar de EEUU a Panamá en diciembre de 1989 dejó unos 3.000 fallecidos.

Hausmann es un aliado de Guaidó, quien supuestamente lo nombró «gobernador» de Venezuela ante el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), según informó ultraderechista venezolano, Carlos Vecchio, también prófugo de la justicia.

Foto: Collage AVN