¡Chávez vive y la lucha sigue!

Escrito por Oscar Rotundo

Solo una persona que despertó tanta esperanza y tanta fuerza popular podía sumir en una inmensa tristeza a millones de personas dentro y fuera de sus fronteras.

El 5 de marzo de 2013, exactamente 9 años atrás, a la 4.25 Pm, el corazón del pueblo humilde de Venezuela, de su republica bolivariana, se acongojaba de una manera indescriptible, se apretaba como un puño de impotencia y dejaba fluir un mar de lagrimas para que navegara la angustia más sincera.

Una interminable multitud, esa de las 7 avenidas del cierre de campaña electoral del 4 de octubre de 2012, lo volvió a acompañar al cuartel de la montaña donde su leyenda permanece inalterable para seguir dando batalla como ese día en el que la torrencial lluvia no pudo romper la conexión con su pueblo.

Esa conexión se construyo con política en un intercambio dinámico entre su conocimiento de las necesidades populares y la confianza que tuvo el pueblo sobre sus criterios para poder construir una sociedad justa que eliminara decenas de años de injusticia enfrentadas con totas las formas de lucha.
Chávez, nació a la política en una sociedad plagada de luchas e injusticias, que vivió e interpretó con aciertos y errores, pero sobre todo con una honestidad política y moral y una constancia y perseverancia en sus ideales, admirables e irreprochables.
Uno de los ejemplos que mejor lo ha retratado, ha sido el “por ahora” de su discurso luego del fracasado levantamiento cívico militar del 4 de febrero de 1992.

Vencido, atrapado en manos de un enemigo sanguinario y con el peso de llevar sobre sus espaldas la tremenda responsabilidad de haber dirigido una operación militar a nivel nacional que congregó a miles de personas que sacrificaron su vida y su libertad detrás de los sueños de Bolívar, Chávez daba la cara al país y asumía lo que ningún político jamás había asumido, una derrota.

“Compañeros lamentablemente, por ahora, los objetivos que nos planteamos no fueron logrados en la ciudad capital… es tiempo de reflexionar y vendrán nuevas situaciones y el país tiene que enrumbarse definitivamente a un destino mejor”

Con entereza le decía al pueblo, que más allá del fracaso de ese intento, había que reflexionar porque por el momento los objetivos no se habían logrado, pero, que vendrían nuevas oportunidades para llevar al país definitivamente a un destino mejor.

Cuando el comandante decía esas palabras sabía que iba a enfrentar un tribunal militar al servicio de la oligarquía que había querido derrotar, pero piensa que la lucha seguía aun que él no estuviera físicamente y que esa jornada del 4 de febrero había sido un episodio más en la larga lucha popular por un destino mejor.

Chávez nunca dejo de tener confianza en el pueblo y en sus potencialidades y es por eso que se transformó en un fenómeno de masas.

Nuevamente, años después, el 11 de abril de 2002, le tocó vivir una nueva batalla contra la oligarquía y el imperialismo, en condiciones distintas, pero con su vida en manos del enemigo criminal y traicionero, y surgieron otras palabras memorables, movilizadoras, “No he renunciado al poder legítimo que el pueblo me dio” ,escritas en una carta desde su lugar de detención, que se propaló por las calles de una Venezuela que volvía a retomar los sueños y no se daba por vencida y lograba en pocas horas revertir la rueda del destino y lograr un episodio inimaginable, traer nuevamente al comandante Chávez al lugar en el que lo había puesto con los votos.

Chávez, el pueblo, y los nuevos desafíos, porque la intolerancia del imperialismo no se detendría y vinieron paros petroleros y guarimbas y atentados y paramilitares y subas y bajas en el precio del petróleo, pero como él decía “amor con amor se paga” y en cada referéndum o batalla electoral ese amor eran votos y triunfos y más gente sumándose a los sueños.

Sueños que compartió con otros líderes, sueños con formas de Alba, de Unasur, de Celac, sueños de multipolaridad, de complementariedad, que se reflejaron en los estrados internacionales y que se discutieron en el Partido Socialista Unido de Venezuela, en la lucha contra el ALCA en Mar del Plata y que siguen vigentes porque la justicia social y la independencia y el socialismo siguen pendientes.

Hoy 5 de marzo, día en que se reúne el 5ºcongreso del PSUV en el que se tiene prevista la participación de más de 2.200 delegados y delegadas que representan a cerca de 25 movimientos, y en momentos en que en el mundo se especula sobre la posibilidad de una Tercera Guerra Mundial, en medio de una dura lucha militar entre la multipolar Federación Rusa y las fuerzas fascistas comandadas por la OTAN en Ucrania, les dejo el discurso memorable y premonitorio del comandante invicto en el congreso fundacional del PSUV, que sigue dando batalla y nos sigue mostrando el Camino.! Chávez Vive. La Lucha sigue¡

EEUU PSUV Revolución Bolivariana