Este domingo, 04 de junio, se cumplieron 193 años del asesinato del Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José Francisco de Sucre y Alcalá, en las montañas de Berruecos, Colombia.
Antonio Josep Francisco de Sucre y Alcalá, como reza en su partida de nacimiento, nació el 03 de febrero de 1795 en la ciudad de Cumaná, hoy estado Sucre; fue un joven político y militar venezolano, prócer de la Independencia americana, así como diplomático y estadista, Presidente de Bolivia, Gobernador del Perú, General en Jefe del Ejército de la Gran Colombia, Comandante del Ejército del Sur y Gran Mariscal de Ayacucho.
Considerado como uno de los más leales y consecuentes compañeros de armas e ideas del Libertador Simón Bolívar, participó en la campaña de Francisco de Miranda, en 1812, contra los realistas y, en 1818 marchó a Angostura, convirtiéndose en uno de los mejores lugartenientes del Libertador, cuya amistad y respeto mantuvo hasta el fin de sus días.
Obtuvo decisivas victorias en las batallas de Pichincha, en 1822, y Ayacucho, 1824, acción que significó el fin del dominio español en el continente sudamericano.
Nombrado por el parlamento peruano Gran Mariscal y General en Jefe de los Ejércitos, proclamó la República de Bolivia, de la cual fue designado Presidente vitalicio, cargó al que renunció en 1828, a raíz de los motines en la nueva nación y la oposición del Perú a la independencia boliviana.
El Mariscal Antonio José de Sucre fue emboscado y asesinado el 04 de junio de 1830 en la sierra de Berruecos, ubicada en Colombia, cuando regresaba a Ecuador con el propósito de mantener la unión grancolombiana, que ya se encontraba en proceso de disolución.
Es considerado como uno de los militares más completos entre los próceres de la independencia sudamericana.
Sus restos reposan en la Catedral Metropolitana de Quito, en Ecuador. En la actualidad, en el Panteón Nacional se mantiene un cenotafio junto a la tumba de Simón Bolívar, con la esperanza de que sus restos, algún día volverán a su tierra natal y reposar definitivamente en el Panteón Nacional.