Una primera lectura sobre los resultados de las elecciones primarias en Argentina

La primera interpretación (mi percepción foránea) de los resultados de estas primarias ( PASO: Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias) para escoger los candidatos (presidenciales, gobernadores…) de las distintas corrientes y coaliciones políticas, me dice, y esta primaria lo constata, que hay una tendencia hacia la “derechización” de la sociedad argentina.
Con un 69.6% de participación el candidato de la “Libertad Avanza” (ultraderecha liberal) Javier Milei obtuvo el 30.2%; Patricia Bullrich (más los votos de Larreta) de “Junto por el Cambio” (derecha tradicional) el 28.3%; Sergio Massa de “Unión por la Patria” (la derecha de la izquierda) el 27.3%; Juan Grabois (izquierda del peronismo) 5.7% y Myriam Bregman (izquierda marxista) 2.65%. Visto así, la diferencia entre los tres primeros no llega a tres puntos, pero lo sorprendente es que Milei ganó en 16 de las 23 Provincias Argentina con consignas como “la justicia social es una aberración”, “dolarización de la economía”, “disminución de los planes sociales”, “ajustes a la jubilación”, “llevar al Estado a su mínima expresión”, “el impuesto es un robo”, «venta de órganos», “privatizar todo lo que pueda ser privatizado” … Su narrativa mediática ha sido presentarse como el candidato “antisistema”, el “rebelde”, el “iconoclasta”, el “antipolítico”, abrevando de la frustración social que ha producido los gobiernos de Mauricio Macri y Alberto Fernández.
Los primeros impactos se manifiestan ya con la inestabilidad macroeconómica en los mercados, el dólar oficial pasó del viernes de 290,00 pesos a 354,60 al mediodía de hoy y el dólar paralelo (blu) en el mismo periodo de 595,00 pesos a 675,00 pesos… con fuerte presión a una mayor devaluación como ajuste, lo que elevará los precios de los alimentos y de los servicios básicos.
Faltan un poco más de dos meses para las elecciones presidenciales y la dinámica política está en plena ebullición, nada es matemático o inexorablemente mecánico, ahora bien, un asunto es la tendencia de la política argentina y sus políticos, y otra, la que hay de fondo, que es la capacidad de maniobra y el “encadenamiento” real a las decisiones e intereses (lógica) del Capital Internacional. El «mercado» no es ciego, como dice la matriz de opinión capitalista, responde a relaciones de poder, a intereses económicos concretos, los cuales tienen agendas definidas, específicas y determinadas: FMI, la extracción del litio, la extracción de combustible de “Vaca Muerta”, la producción agrícola, pecuaria, la ubicación de argentina con respecto al Polo Sur… eso es lo que no se ve pero es lo que decide y decidirá las próximas elecciones.

Humberto Rojas D.