No hay nada más precioso que la independencia y la libertad: unidad, unidad, gran unidad, victoria, victoria, gran victoria.
Hồ Chí Minh
El nuevo embajador de la República Socialista de Vietnam en la República Bolivariana de Venezuela, Vũ Trung Mỹ, a cuatro meses de haber presentado cartas credenciales ante el presidente Nicolás Maduro, apuesta a la reactivación de la empresa mixta Petro Macareo, a la retoma del cultivo masivo de arroz y la profundización de los lazos de amistad entre la patria de Hồ Chí Minh y la Venezuela de Simón Bolívar.
Cuando el comandante Hugo Chávez tomó las riendas del país, en 1999, las relaciones diplomáticas con Vietnam eran como un cero a la izquierda, pero tras su visita a Hanói, el 31 de julio del año 2006, en la capital vietnamita flameó por primera vez el tricolor bolivariano y en La Castellana, al este de Caracas, se vio batiente la bandera de los decididos a combatir y vencer de color rojo y estrella amarilla.
El primer embajador vietnamita en Caracas, Trần Thanh Huân, ipso facto, activó la Casa de Amistad y Solidaridad Venezuela Vietnam, con el apoyo del doctor Octavio Beaumont Rodríguez como presidente, quien contó con la colaboración de los guerrilleros que en 1964 habían capturado en Caracas al aviador estadounidense Michael Smolen, en solidaridad con la causa vietnamita. En Hanói, como expresión de la diplomacia pueblo a pueblo, la Unión de Asociaciones de Amistad de Vietnam daba a conocer el funcionamiento de la Asociación de Amistad Vietnam Venezuela, presidida por Vũ Văn Hiến.
Desde entonces, cinco embajadores del país indochino han ejercido funciones en la capital venezolana, mientras que a Hanói han viajado, durante el mismo lapso, los diplomáticos Jorge Rondón Uzcátegui, Tatiana Puig Moreno y Juan Carlos Fernandes, designado recientemente por el presidente Maduro como embajador plenipotenciario en Hanói.
El gran reto
La primera gran meta del comandante Chávez respecto a Vietnam fue establecer una alianza en materia petrolera, para lo cual fue creada la empresa mixta Petróleos de Venezuela (Pdvsa)-Petro Vietnam, para trabajar en el Bloque Junín 2 de la Faja Petrolífera del Orinoco, con la meta de extraer 200 mil b/d, mientras que Pdvsa tendría una participación del 30% en la futura refinería Long Song vietnamita.
En el camino, varios factores dificultaron el desarrollo del magno proyecto, que terminó por paralizar la producción en Junín 2, pero catorce años después los nuevos embajadores tienen como misión impulsar la reactivación de las acciones en la faja petrolífera que hoy lleva el nombre de Hugo Chávez.
Varios proyectos —como una fábrica de bombillos rendidores en Punto Fijo, la instalación de sistemas de alumbrado modernos en varios sitios del país y el cultivo de arroz— no tuvieron la suerte deseada, pero el nuevo embajador está comprometido con el plan Petro Macareo y la producción agrícola, sobre todo en materia del mencionado cereal, del cual Vietnam es uno de los grandes productores mundiales.
En estos momentos, los proyectos petroleros y agrícolas están en proceso de revisión y evaluación, para volver con más fuerza en la faja petrolífera y las tierras guariqueñas, donde la experiencia en el cultivo de arroz dejó grandes satisfacciones.
En la entrevista que el embajador Vũ Trung Mỹ dio para el programa Vietnam en Venezuela, que trasmite Oyeven 106.9 FM, pudimos conocer que ambas embajadas transitan por un proceso en el cual evalúan planes que incluyen, además, proyectos de telecomunicaciones, turismo y actividades culturales.
Durante los cuatro meses que tiene en el país, Trung Mỹ ha recorrido varias ciudades venezolanas y ha quedado impresionado con la diversidad geográfica de Venezuela, su paisajismo y clima, lo cual considera una bendición, apropiada para poner en práctica planes con fines turísticos. En ese sentido, expresó que Vietnam tiene mucho que ofrecer con su larga experiencia en la materia, la cual han convertido en una economía de punta. Es el caso de los cientos de aldeas artesanales que existen en todo Vietnam, que se han convertido en emporios turísticos, como el caso Than Ha en Văn Phú, ubicada en el medio Vietnam, o Ba Tháng, localizada en la ribera del Río Rojo, a la altura de Hanói. Se trata de pueblos artesanales que además de producir diversidad de artículos, captan turistas nacionales y extranjeros.
Antes de la pandemia, Vietnam había superado la meta de 16 millones de turistas extranjeros, cifra que prometen retomar muy pronto, y para el año 2030 esperan alcanzar los 40 millones en materia de turismo nacional, lo que consideran de gran importancia para la integración nacional y la difusión cultural.
El diplomático Trung Mỹ ve con optimismo considerar la idea de incentivar a inversores vietnamitas para que contribuyan al desarrollo turístico venezolano. A la par, la Embajada coadyuvará, trayendo grupos artísticos tradicionales para dar a conocer la cosmovisión vietnamita.
Consideró de gran importancia la apertura este año del programa radiofónico Vietnam en Venezuela, que difunde Oyeven 106.9 FM, en función de profundizar la proyección, vida y costumbres vietnamitas en toda Venezuela.
En materia de hermandad, el embajador vietnamita agradeció la iniciativa tomada por un grupo de venezolanos de la ciudad de Acarigua, estado Portuguesa, de crear un comité de solidaridad a la causa vietnamita, en su campaña por solicitar ante los tribunales estadounidenses el reparo por los efectos causados por las 37 empresas que fueron contratadas por el Pentágono para esparcir el llamado agente naranja sobre grandes territorios del sur de Vietnam, entre los años 1961 y 1971.
Tropas extranjeras aliadas de Estados Unidos en su guerra contra Vietnam fueron afectadas por el agente naranja y las cortes estadounidenses han reconocido los daños causados a sus soldados y han resarcido los daños causados por las dioxinas. Es el caso de Australia, Nueva Zelanda, Corea del Sur, Tailandia y Filipinas. Miles de soldados estadounidenses también resultaron afectados y fueron protegidos por los tribunales, como el caso de la familia del comandante estadounidense del operativo agente naranja, el almirante Elmo Zumwalt jr, cuyo hijo, el teniente Elmo Zumwalt III, quien combatió en Vietnam, resultó afectado por los tóxicos, de tal manera que un tribunal estadounidense debió indemnizar a la familia Zumwalt con 80 millones de dólares.
Ante la negativa de reconocer los efectos ocasionados a la población vietnamita, estimada en más de cuatro millones de personas, la Asociación de las Víctimas del Agente Naranja (VAVA, por sus siglas en inglés), ha emprendido una campaña mundial ante las cortes estadounidenses desde el año 2004. De allí la importancia de la iniciativa emprendida por el grupo de venezolanos que organizan un comité de solidaridad con esa causa, desde la ciudad de Acarigua.
Ángel Miguel Bastidas G.
Fuentes de consulta:
Vietnam en Venezuela. (2023). [Emisión de Radio]. Oyeven 106.9 FM. Caracas.
Giap V. N. (2009). La cita de la historia. Caracas: Monte Ávila editores Latinoamericana.