Nicolás Maduro (EFE/ Miguel Gutiérrez/Archivo)
Zorbel Colmenares Arrieche, Yusbey Catherine Colombo Chacón y Katty Carolina Delgado Montilla no tienen dudas sobre a quién debe pertenecer el territorio y por ello no hay razón para realizar una consulta
PorSebastiana Barráez/Tomado de infobae.com
Desde que el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge de Jesús Rodríguez Gómez, propuso un referéndum consultivo sobre el Esequibo, un territorio en reclamación con Guyana, muchos dirigentes políticos, militares e intelectuales del país han alegado que la verdadera intención, de esa desesperada estrategia, es presentar al mundo un Nicolás Maduro con respaldo popular. Pocos se han atrevido a manifestar su rechazo por la maniobra política del referéndum ante el costo político de ser señalados de “traidores” o de estar en contra del país. Tres mujeres, concejales, líderes políticas del estado Táchira, sí lo dijeron alto y sin vacilar.
Zorbel Colmenares Arrieche, Yusbey Catherine Colombo Chacón y Katty Carolina Delgado Montilla, las tres concejales tachirenses de los municipios Guásimos, Cárdenas y Torbes respectivamente, no tienen dudas que el Esequibo es venezolano y por ello no hay razón alguna para consultar al respecto. No caerán en la celada que, desde el partido de Gobierno y la Asamblea del chsvismo, se ha montado para presentar a Nicolás Maduro como un líder a nivel internacional.
Ese argumento es el mismo que ha manifestado un numeroso grupo de venezolano, por lo que Rodríguez pasó de un referéndum para que el “pueblo de Venezuela, por vía del voto directo y secreto, tome decisión y refuerce los inalienables derechos de Venezuela y su pueblo sobre el territorio de la Guayana Esequiba”, como dijo el 21 de septiembre, a “para que el pueblo ordene directamente las acciones que el gobierno debe tomar para defender el Esequibo”.
Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional, propuso el referéndum sobre el Esequibo
“Un referéndum consultivo no es el mecanismo para proteger la soberanía nacional, el Estado ya posee los mecanismos enmarcados y estructurados en la Constitución de la República. No es una oposición per se a una consulta, es una clara invitación a no permitir que pase más tiempo sin acciones claras y contundentes, que nos pueden terminar por despojar de nuestro Esequibo”, asevera la concejal del municipio Cárdenas, Yusbey Catherine Colombo Chacón.
Colmenares Arrieche por su parte considera que la estrategia del referéndum es una manipulación política “para legitimar al gobierno nacional a nivel internacional, resultando paradójico porque los propios aliados del gobierno guyanés son los mismos que Venezuela tiene económicamente pero que no intervienen en este conflicto simplemente porque tienen intereses en esas inversiones”.
Así mismo, Delgado Montilla, quien es la presidente de la Comisión de deportes, espectáculos públicos y recreación del Concejo Municipal de Torbes, se niega a ser parte de una campaña política partidista para tratar el tema, por lo que descarta que sea un referéndum consultivo el mecanismo para proteger la soberanía nacional.
Concejal de Guásimos, Zorbel Colmenares Arrieche
Muy agresivo
Zorbel Colmenares Arrieche es una concejal del partido Acción Democrática (AD) en el municipio Guásimos, que se defiende ante los ataques de descalificación por parte del alcalde José Evaristo Zambrano Chacón, quien no sin cierta misoginia la ha atacado verbalmente en las sesiones de la Cámara Municipal y también en programa un programa de la emisora 89.3FM.
Ella salvó su voto en lo del referéndum, y así lo hizo en escrito a puño y letra dirigido a la presidente del Concejo, Andrea Nathaly Escalante Villamizar. El alcalde Zambrano, en un programa de radio, aupado por subalternos.
El burgomaestre quiso hacer creer que la concejal estaba en contra del país porque no votó el acuerdo, adrede desconoció el argumento de Colmenares, perfectamente sustentado donde casualmente uno de los puntos de su voto salvado es que politizar el tema resultará en contra de los intereses de Venezuela.
Alcalde de Guásimos, José Evaristo Zambrano Chacón
El alcalde se atrevió a decir: “No los une ni siquiera el fervor patrio, ni siquiera el amor patrio, la falta de valores, el nacionalismo”.
Entre tartamudeos, Zambrano respondió a quienes señalan a la revolución bolivariana de dejar pasar mucho tiempo sin intentar recuperar el Esequibo: “¿por qué no lo han recuperado? porque Venezuela no es guerrerista, Venezuela tiene vocación democrática, la única vez que hemos salido a conquistar ha sido para liberar. ¿Por qué no lo hemos recuperado? por el respeto humano, el diálogo, el tender los brazos, buscar el entendimiento entre los pueblos, entre los países para lograr un feliz acuerdo”.
Y los dos subalternos, Consuelo Acevedo y un individuo también enfilaron contra la concejal de AD, advirtiendo que era bueno “evaluar en un personaje de la política esa falta de patriotismo, esa falta de moral, de verdad y de identidad. Son cosas bastante delicadas y de evaluar en un personaje que está en la política de nuestro municipio, que tiene un cargo de elección popular”.
Puño y letra para defender su posición. El voto salvado de Zolbel Colmenares
El voto de Zorbel
En el escrito a Escalante la concejal Colmenares Arrieche dice: “Venezuela, al iniciar su transformación en país independiente desde 1810, los territorios, entre ellos la Zona de Reclamación del Esequibo, no estaban muy definidos, por lo extenso de los territorio y lo poco poblado situación que se encontraba reflejada por todos los límites territoriales de Venezuela pero, en especial, en la disputa generada y los acuerdos impuestos por Gran Bretaña sin que el Estado venezolano, hasta el día de hoy, acepte la pérdida de este importante territorio”.
Agrega que en el documento de Stephany Hernández, Análisis Prospectivo del Conflicto Territorial entre Guyana y Venezuela, “nos establece, de manera muy puntual, aspectos de gran importancia histórica y política del conflicto o disputa que, a lo largo, Venezuela ha llevado a cabo representando más de 200 años; son 159.500 Km2 de territorio reclamados, y del cual es conocido como Esequibo y que es administrado por el gobierno de Guyana. Esto derivado de la decisión de Laudo Arbitral de París en el año 1899, sin representación de Venezuela”.
La concejal Colmenares dice que en el Acuerdo de Ginebra, en 1966, se acordó buscar una solución pacífica derivada del artículo 33 de la carta de la Organización de las Naciones Unidas acuerdo que fue firmado por Venezuela y el Reino Unido. En el año 2018 el secretario general de la ONU decidió que este conflicto debía ser dirimido por la Corte Internacional de Justicia.
“Han sido más de 200 años de discrepancias. En primer término el conflicto con Inglaterra (Guyana Británica) la cual era una colonia y en segundo término con Guyana (Estado soberano) reconocido por Venezuela, pero no con el territorio que históricamente es venezolano”.
“La pretendida utilización del referéndum consultivo resultaría inapropiado pues se denota un interés político partidista para sacar provecho y exacerbar el nacionalismo de muchos venezolanos, pues en todo caso todos lo somos y todos queremos recuperar ese territorio”.
Agrega “se debe evitar el enfrentamiento entre nosotros, oficialistas y opositores; no es momento de reprocharnos ni de marcar diferencias de quién es o no venezolano, porque lo que sí se puede asegurar es que nuestra patria es grande y a todos nos duele”.
La dama concejal se pregunta ¿dónde está la posición del gobierno nacional en rechazo a las exploraciones o explotaciones petroleras? Más aún la de la Fuerza Armada activándose en resguardo de nuestra soberanía. “El seguir otorgando estas concesiones se irrespeta los preceptos y autoridad internacional nuestro deber como venezolanos es hacer cumplir y acatar la constitución así como la del estado venezolano de desarrollar una verdadera política que permita reivindicar nuestro derecho histórico”.
“No puedo estar de acuerdo ni estaré de acuerdo con la realización de actos que contribuyan a manipular y a exacerbar nacionalismos. Debemos ser garantes a que se cumplan los mandatos constitucionales en materia de deberes ciudadanos relaciones internacionales seguridad y defensa de la nación”.
“El gobierno tiene facultad, competencia y los mecanismos para actuar de manera contundente, sin ningún tipo de dilación, pues esto puede acarrear costos innecesarios para la nación; que en estos momentos de crisis es imperativo resolver como la crisis eléctrica que atravesamos diariamente y que nos afecta en todos los sectores afectando, e incluso violentando, nuestros derechos humanos. ¿Por qué no se nos pregunta como ciudadanos. al momento de ofrecer a otros países si estamos de acuerdo en vender energía, por ejemplo, o cualquier otra inversión que perjudica a Venezuela?”
Es enfática al manifestar que “la soberanía no se debe someter a referéndum mi razonamiento es aún llamado sin posturas partidistas o parcialidad política los venezolanos todos unidos debemos ejercer acciones en el tiempo que no permitan más la inacción o el silencio, pues eso nos ha costado bastante”, finaliza diciendo.
Colombo Chacón, concejal de Cárdenas
La ruta Constitucional
La concejal y licenciada Yusbey Catherine Colombo Chacón, quien es presidente de la Comisión Control del Medio Ambiente y Turismo, del municipio Cárdenas, dejó por escrito, en misiva dirigida a la presidente del Concejo Municipal, Liliana María Misal Cuadro, su posición ante la propuesta de acuerdo en apoyo al “Referéndum Consultivo para ratificar la Paz, Libertad y Soberanía del pueblo de Venezuela a propósito de la Defensa del Esequibo”.
Recuerda la profesional que “la Constitución de la República establece una serie de figuras idóneas para la defensa integral de la Nación, su soberanía y la integridad de su espacio geográfico. Por lo tanto, nuestro reclamo se enmarca en la línea nacionalista y patriótica del ejercicio de la soberanía sobre el Esequibo apoyados en el derecho histórico que acompaña a la República en su justa, correcta y pertinente reclamación asistida y acompañada de títulos jurídicos”.
Agrega que “a lo largo de nuestra historia pre republicana y republicana lo que hoy se conoce como zona en reclamación o Esequibo ha sido parte de nuestro territorio y extensión geográfica”, para lo que se apoya en el artículo 10 de la Constitución”: “El territorio y demás espacios geográficos de la República son los que correspondían a la Capitanía General de Venezuela antes de la transformación política iniciada el 19 de abril de 1810, con las modificaciones resultantes de los tratados y laudos arbitrales no viciados de nulidad”.
La misiva de la concejal Colombo ante la propuesta de referéndum
Recordó que el Estado y los venezolanos han rechazado arbitrajes internacionales como el Laudo Arbitral de París de 1899 “que han dado al traste con el respeto a nuestro territorio patrio, con sobradas razones, conocidas con el tiempo en un documento publicado en 1949, redactado por Severo Mallet- Prevost, quien exponía y denunciaba que el laudo fue una componenda política en contra de Venezuela. “Tres jueces que tenían la mayoría dispusieron del territorio de Venezuela, porque los dos jueces británicos no estaban actuando como jueces, sino que lo hacían como hombres del gobierno”. Razón por la cual, el Estado basa la defensa de nuestro territorio en reclamación, en el acuerdo de Ginebra firmado entre Venezuela y el Reino Unido”.
Colombo Chacón argumenta lo que sin duda Jorge Rodríguez ha pretendido ignorar, y es que “la ruta a seguir está en la Constitución al establecer que ‘El Consejo de Defensa de la Nación es el máximo órgano de consulta para la planificación y asesoramiento del Poder Público en los asuntos relacionados con la defensa integral de la Nación, su soberanía y la integridad de su espacio geográfico’. Ahí se indica el orden y sentido en que se deben ejercer las acciones de Venezuela”.
Enfatiza la dirigente que “nuestro ánimo es el de ejercer el reclamo efectivo de lo que le corresponde a Venezuela, el de acudir sin vacilaciones o sin argumentos débiles y fácilmente refutables por parte de intereses extranjeros que buscan despojar lo que pertenece a los venezolanos, porque se debe afirmar y reafirmar que cada uno de los 159 542 km2 que corresponde al Esequibo es de Venezuela, y por lo tanto de los venezolanos”.
Lo que espera es que “el Estado se preocupe y ocupe de conformar una comisión nacional de protección de nuestro territorio Esequibo, y que esta se conforme con los mejores profesionales en materia jurídica nacional e internacional, con miembros de la academia de la historia, con estudiosos del tema, que tanto le ha costado al país, y que por un tiempo largo, por un tiempo muy representativo se dejó de reclamar por intereses de índole político y la composición de los apoyos en la geopolítica latinoamericana”.
“Nuestro ánimo apunta a elevar una campaña de corte nacionalista, sin parcialidad política o partidista alguna, en donde los venezolanos participen de manera activa en la defensa de nuestros derechos soberanos sobre nuestro territorio Esequibo; no permitir el silencio o la inacción que hicieron parte fundamental y que en estos momentos pesan y cuestan mucho para los venezolanos”, asentó Yusbey Colombo, concejal del municipio Cárdenas.
Katty Carolina Delgado Montilla, edil municipio Torbes
No a politizar el tema Esequibo
Katty Carolina Delgado Montilla, concejal del municipio Torbes, en comunicación dirigida al presidente del Concejo Municipal, Moisés Tovar, fijó su posición ante la negativa de respaldar un acuerdo que el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ha girado a todas las municipalidades y consejos legislativos del país con la estregia de usar el resultado de un referendum sobre el esequibo, con fines políticos.
“La Constitución de la República establece una serie de figuras idóneas para la defensa integral de la Nación, su soberanía y la integridad de su espacio geográfico. Por lo tanto, nuestro reclamo se enmarca en la línea nacionalista y patriótica del ejercicio de la soberanía sobre el Esequibo apoyados en el derecho histórico que acompaña a la República en su justa, correcta y pertinente reclamación asistida y acompañada de títulos jurídicos”.
Ella, igual que las dos concejales antes mencionadas, cita la Constitución y apoya sin vacilar que: El territorio y demás espacios geográficos de la República son los que correspondían a la Capitanía General de Venezuela antes de la transformación política iniciada el 19 de abril de 1810, con las modificaciones resultantes de los tratados y laudos arbitrales no viciados de nulidad.
“Por lo tanto, el Estado y los venezolanos han rechazado arbitrajes internacionales como el Laudo Arbitral de París de 1899 que han dado al traste con el respeto a nuestro territorio patrio, con sobradas razones, conocidas con el tiempo en un documento publicado en 1949, redactado por Severo Mallet-Prevost, quien exponía y denunciaba que el laudo fue una componenda política en contra de Venezuela”.
Respalda que “el Estado basa la defensa de nuestro territorio en reclamación, en el acuerdo de Ginebra firmado entre Venezuela y el Reino Unido”, destacando que el artículo primero del mismo “reconoce la contención de Venezuela de considerar nulo e írrito la decisión del tribunal que definió su frontera con Guayana Británica. Por lo tanto, al Reino Unido firman el documento, donde dio reconocimiento al reclamo y la inconformidad de Venezuela, lo que abría las puertas a encontrar una solución práctica, pacífica y satisfactoria para los involucrados”.
Cita el artículo 323 constitucional sobre el rol del Consejo de Defensa de la Nación como máximo órgano de consulta en una materia relacionada a la soberanía y el espacio geográfico.
Recomienda que “el Estado se preocupe y ocupe de conformar una comisión nacional de protección de nuestro territorio Esequibo, y que esta se conforme con los mejores profesionales en materia jurídica nacional e internacional, con miembros de la academia de la historia, con estudiosos de tema, que tanto le ha costado al país, y que por un tiempo largo, por un tiempo muy representativo se dejó de reclamar por intereses de índole político y la composición de los apoyos en la geopolítica latinoamericana”, dice Delgado.