22/12/2023.- Esta carta fue escrita a finales de los años de la década de los setenta. Conseguida bajo los escombros de la infancia de los años 50-60; pudiésemos decir que se trata de uno de los primeros grafitis escritos en lágrimas, recostado a las paredes del estómago. No tiene ningún referente de la felicidad ni se escuda en la génesis de todo lo dicho que tiene su semilla en el latín, y menos en las tablas de la palabra, con que se hizo techo, el cielo embarrialado de muchas pruebas imaginarias de lo que nombraron casa. Da argumento sí, de aquella conceptualización respecto a que ningún tiempo pasado fue mejor desde que comenzó la historia de la desigualdad social. Realidad que seguramente no vio Marx en sus extremos, pero que sí develaron las guerras que con sentimiento en nosotros, más que con razones de poder, se hicieron pan nuestro de cada necesidad, a lo largo y ancho de la colonización de América, incluyendo sus consecuencias y respuestas bélicas, suscritas en la independencia de los descamisados de la historia, que con Bolívar araron y echaron a andar el sueño, hasta el día de hoy que aún se limpia la maleza, buscando la cosecha de vida digna concebida con la sangre de nuestros muertos.
Tal cual como fue escrita, así se concibió. Este niño seguramente ya habrá muerto o por lo menos su infancia. Y hasta el día de hoy, poco ha cambiado para hacer justicia. Diariamente 24.000 personas mueren de hambre en el mundo y, de ellas, 18.000 son niños y niñas de entre uno y cuatro años. La estadística es ahí, usted la puede saborear, y sobre todo tragarnos la indignación y la hipocresía de los organismos internacionales.
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Carta en navidad
Querido papa no se en quéelugar estaras ahora.
pero quiero enviarte esta carta con mi mama
que tan poco abla de ti
pero que siempre como en toda nabida sabe donde estas
Necesito contarte lo desobediente que e sido
quiero desirte que e dejado de ir a la escuela para pode trabaja
y ayuda a mi mama a mantener a mis otros ermanitos
aunque te confieso pa de ves en cuando elevar un papagayo
y juga a las metras con los muchachos del barrio
Quiero desirte que a mis ocho años no se lee ni escrivi mui bien
y que llego todos los dias mui tarde de la noche
que después de limpia sapatos todo el dia y comprar la arina para las arepas
veo el ultimo pedaso de la película cuando dejan entra sin covra
Querido papa tanbien quiero desirte que tengo mucha culpa
porque mis ermanos no tengan nada que come ni que vesti
porque no e sabido gana la suficiente plata
Quiero que me perdones por aberle limpiado los sapatos a un mendigo
por aberle regalado una de tus camizas que mucho tiempo estan guardadas en el escaparate
a un amigo viejito que tengo en el asilo que me dice eres todo un ombre
Me reconozco malo por no aber ido al entierro de la abuela
pero nunca nos dijistes donde vivia
Porque las iglesia son tan vonitas papa
y el sin de nuestra casa aquí es tan frio
Porque tantos viejitos i niños como yo
duermen en las calles arropados con periodicos.
Me lo explicaras papa
Papa como se le pide al niño Jesús pa que le traiga juguete a mis ermanitos
Porque mi mama no me regaña ni abla conmigo cuando yo salgo en la mañana y ella llega
Me llebaras a conocer el mar papa
Me perdonaras por matar palomitas y comérmelas
Tirarle piedras a la luna
Tocar todos los timbres de unas casas mui grandes
Rovarle la covija al barvero que te afeitaba
Y ponerme tus corvatas los savados en la noche cuando estoi solito en la casa
Papa tu me quieres berda
Estoi mui triste por lo malo que me e portado todo el año
Y e llorado mucho cuando arropo a mis ermanos
Cuando llego en las noches mui de noche y me acuerdo de si tu estuvieras
Y te veo papa durmiendo tanvien en el suelo junto a ellos y yo
Pero yo en el fondo soi vueno papa
Verda que yo no tengo toda la culpa papa
Papa estoi cansado mucho
No quiero mas limpia zapatos
Las manos me duelen
Los ojos me arden
Las piernas se me encalambran
Tengo miedo i mucho anda solo
No quiero en la calle otro 31
Sabes mis ermanitos han sido mui vuenos i mi mama tanvien mucho
Papa por todo lo malo que me e portao
Quiero que le digas al niño Jesús
Que no me traiga nada pa este diciembre
Pero que no se olvide de mis ermanitos y mi mama
Papa dios me quiere todavía verda
¿me quiere?
Del libro Los inversos de la niñez. Ediciones Tinta, Papel y Vida.
Carlos Angulo