La posibilidad de un cambio de gobierno en Estados Unidos pudiera representar una amenaza para el cumplimiento de los compromisos
LEOPOLDO PUCHI
El mes de enero se caracteriza por ser un período de análisis prospectivos y de previsiones que buscan anticipar los posibles desarrollos de la situación heredada del año anterior. En esta ocasión, el Foro Económico Mundial presentó su Informe Global de Riesgos 2024, mientras que el Crisis Group pone su atención en 10 conflictos decisivos para el año. Por su parte, la Unidad de Inteligencia de The Economist publicó su Informe sobre los escenarios de riesgos.
Estos informes destacan diversos aspectos como las políticas monetarias, las guerras comerciales, el descontento social, la elección de un nuevo presidente en Estados Unidos, la guerra de Ucrania y el Medio Oriente, el choque de Washington y Beijing, los conflictos regionales y la regulación de la inteligencia artificial.
INTERCONEXIÓN
Todos los puntos que mencionan estos informes tendrán algún tipo de impacto en la evolución de los acontecimientos en Venezuela. Sin embargo, destaca uno en particular, por su incidencia más inmediata y visible: los posibles virajes que podrían surgir en la política exterior de Estados Unidos como consecuencia de las elecciones presidenciales, especialmente ante la perspectiva de un retorno al poder de Donald Trump.
DONALD TRUMP
Trump ha salido victorioso en las elecciones primarias tanto en Iowa como en New Hampshire. Este triunfo lo coloca en una posición ventajosa y despeja el camino para asegurarse la nominación presidencial republicana sin mayores obstáculos.
Sin embargo, todavía existe la posibilidad de que sus actuaciones violatorias de las leyes lo conduzcan a una inhabilitación. Además, en cualquier escenario, su historial político y discurso pugnaz generan incertidumbres que limitan sus perspectivas de triunfo frente a Joe Biden.
INQUIETUDES
La postulación de Trump y sus posibilidades de victoria reflejan la situación de disfuncionalidad política por la que atraviesa Estados Unidos. En este contexto, la resistencia de la élite estadounidense a aceptar el declive de la unipolaridad pudiera intensificarse bajo el estilo disruptivo de Trump.
Su discurso tiene elementos de las denominadas políticas aislacionistas, que lo orientan a la búsqueda de la grandeza nacional sin involucrarse ampliamente en compromisos internacionales.
A pesar de ello, su enfoque de ruptura conflictiva con China y la adopción de la doctrina Monroe como guía para sus relaciones con Latinoamérica hacen que la mera posibilidad de su retorno genere grandes inquietudes.
VENEZUELA
En Trump, la convicción de que todo el continente americano es parte intrínseca del poderío estadounidense se expresa con mayor fuerza que en otros líderes. En esta óptica, el continente debe mantenerse estructurado como parte de un dispositivo geopolítico que subordina las distintas naciones al liderazgo estadounidense.
Esta visión condujo a su administración a adelantar una política de intervención en Venezuela por medio de un plan que incluía la designación de un gobierno paralelo y la ejecución de un duro bloqueo petrolero y financiero, con el propósito de provocar el derrocamiento del gobierno mediante un levantamiento militar.
PETRÓLEO
¿Retomará Trump esa política? No necesariamente, ya que las experiencias enseñan y los actores internos que eligió estuvieron lejos de satisfacer sus expectativas. Además, el epicentro de su interés por Venezuela reside en el petróleo. Durante la convención republicana en Carolina del Norte, en junio de 2023, Trump declaró: “Cuando dejé la presidencia, Venezuela estaba a punto de colapsar. Nos hubiéramos apoderado de ella, nos hubiéramos quedado con todo ese petróleo”.
Ahora bien, si este interés por el petróleo se aborda desde una perspectiva pragmática y de respeto mutuo, se podría abrir la puerta a un amplio acuerdo petrolero con Venezuela, lo que evitaría que Trump tropiece de nuevo con la misma piedra y reinicie hostilidades.
GARANTÍAS
Hasta el momento, la administración Biden y el gobierno venezolano han avanzado en importantes acuerdos que implican compromisos relacionados con un esquema de coexistencia entre ambos países y de convivencia interna.
La posibilidad de un cambio de gobierno en Estados Unidos pudiera representar una amenaza para el cumplimiento de los compromisos, dado que Washington tiende a cambiar de posición y en ciertas ocasiones ha descartado acuerdos establecidos con otros países. Este asunto delicado requerirá una evaluación continua, porque este mismo año se realizarán las elecciones en Venezuela.