27 DE FEBRERO DE 1989Historia Oral Subversiva y Descolonizadora.

2024-02-26] Octavio Beaumont:

Era un día lunes 27 de febrero de 1989, gobernaba a Venezuela, el partido social demócrata Acción Democrática AD, siendo presidente de la República Carlos Andrés Pérez, agente de la CIA desde los años 1960 cuyo seudónimo era Santiago.

Es importante desmentir la versión oficial, que los sucesos insurreccionales en su principio se produjeron en Caracas, sino por el contrario, los hechos de protestas tuvieron su origen, en la ciudad de Guarenas. Estado Miranda. Lo que dio motivo principal a la protesta popular, fue un aumento del pasaje urbano y extra urbano, igualmente la gran crisis ética política y económica que vivís la Venezuela de la Cuarta República.
Desde 1958 hasta 1998, el país estuvo gobernado por los partidos AD y COPEI , firmantes del denominado Pacto de Punto Fijo, siendo sus firmantes Rómulo Betancourt Rafael Caldera y Jovito Villalba. Estos gobiernos tuvieron pleno apoyo de FEDECAMARAS, iglesia católica reaccionaria, militares apátridas y del gobiernos imperialista de los Estados Unidos, la Misión Militar Norteamericana instalada en Caracas, el FBI y la Agencia Central de Inteligencia CIA.

Todo esto se unió las medidas económicas, políticas, y sociales dictadas por el presidente Pérez, con la anuencia del Fondo Monetario Internacional FMI. Cuando se originaron las protestas en Caracas y Guanare, el primer mandatario de Acción Democrática, estaba en una reunión con la cúpula de FEDECAMARAS, en la ciudad de Barquisimeto, Estado Lara.

A las cuatro de la tarde, dos periodistas del Diario de Caracas , se trasladaron a la sede del Terminal del Nuevo Circo. Al llegar el reportero gráfico, empezó a tomar fotografías, había gente caminando y corriendo, dentro y afuera del Terminal de Pasajeros. En el lugar estaban agentes de la Policía Metropolitana y efectivos de la Guardia Nacional, iban con máscaras antigas, chalecos antibalas, revólveres, pistolas , escopetas, su ametralladoras, granadas y fusiles fales. De repente policías y los guardias nacionales, empezaron a lanzar bombas lacrimógenas, disparos de escopetas y disparar con los fales y las sus ametralladoras.

Un grupo de más de cien personas, encapuchados y armados, respondieron al ataque policial. Fueron incendiados varios negocios, también trataron de incendiar la sede del Cuerpo de Bomberos del Distrito Federal, pero está acción fue repelida por los bomberos de turno. Igualmente el pueblo armado con arrechera producto de la lucha de clases, procedió a incendiar la sede del partido Acción Democrática, una mueblería, confiscar productos de negocios de comida, hoteles, restaurantes, ropa, zapatos. Las sirenas de las ambulancias, alborotaban el lugar, trasladando a los muertos y heridos, que eran trasladados a los Hospitales Vargas, Clínico de la Universidad Central de Venezuela, El Llanito, Pérez Carreño y Hospital Militar de San Martín.

Los periodistas tuvieron que correr y esconderse, porque fueron atacados por los policías y guardias nacionales. El vehículo del Diario de Caracas, recibió algunos disparos y sus cauchos desinflados. El chófer y los dos periodistas, lograron llegar a la Estación del Metro del Parque Carabobo, subir a un vagón para llegar a la sede del Diario de Caracas. Las protestas populares se dieron en Catia, El 23 de Enero, Petare, La Bombilla, El Cementerio, Parque Central, San Agustín del Norte y del Sur, San Martí, San José, La Pastora, Lídice, Manicomio, Los Magallanes, Casalta, Monte Piedad. Los Rosales, Chacao, Chacaito, El Silencio, Caricuao, Antimano, Kennedy, El Paraíso. Sabana Grande. El Márquez, La California La redacción estaba tomada por un comando del Ejército, al mando de un coronel de apellido Noriega. Dicho oficial informó que «el Presidente Pérez, no aparecía por ningún lugar por lo que había un vacío de poder que iba a ser sustituido por una Junta Militar».

En la redacción había pánico, miedo, arrechera y confusión, por lo que pudiera pasar en el país, y temor a ser asesinados. Lo cierto es que el movimiento insurreccional duro 27 y 28;de febrero 1989, 1, 2 y 3 de marzo 1989, en las ciudades de Caracas, Guarenas. Los Teques, Maracay, Valencia, Barquisimeto, San Felipe, Puerto La Cruz, Barcelona, San Cristóbal. Mérida, Barinas, Trujillo, Acarigua, Ciudad Bolivar, Maturín, Cumaná, Cojedes. El día 28 de febrero de 1989, a las cuatro de la tarde, llegaron unos sobres clandestinos, donde habían comunicados, reivindicando la insurrección popular, firmados por las organizaciones revolucionarias, tales como Los Tupamaros, Desobediencia Popular ( DP), Partido Revolucionario Obrero Campesino (PROC). Por supuesto estas informaciones, no fueron publicadas por órdenes del fascista pitiyanqui Marcel Granier, director del Diario de Caracas. Argumentó Granier, que los comunicados políticos, incitaban a la guerra.

El gobierno violador de los derechos humanos de Carlos Andrés Pérez, informó a la opinión pública nacional e internacional, que en los sucesos del 27 de febrero de 1989, hubo 273 muertos y cientos de herido. Esto no se lo creyó ningún venezolano, por lo cual el historiador Federico Brito Figueroa, en una entrevista al Suplemento Cultural de Últimas Noticias, denunció que » en los sucesos del 27 de febrero, hubo nueve mil muertos, miles de heridos y desaparecidos, igualmente 20 mil negocios fue fueron destruidos en todo el país. También acusó a la Policía Metropolitana y la Guardia Nacional, de haber cometido los asesinatos, heridos y desaparecidos». Una señora de nombre Ana, de 80 años edad, habitante del Barrio La Bombilla, manifestó. » Esto del 27 de febrero, fue un carajazo para los ricos y un día de júbilo para los pobres». Por otra parte confesó que. » el peo económica es muy difícil de solucionar». Para finalizar expresó » coño, las que sabemos de economía, somos las amas de casas, y no esos pendejos de los economistas, que no saben nadar».

Lo cierto es que el pueblo venezolano, permaneció todo el tiempo en la calle, en pie de lucha por sus derechos políticos sociales económicos, hasta que en 1999 asumió presidencia de Venezuela el teniente coronel Hugo Rafael Chávez Frías.