EL FUEGO
A la memoria de Aarón Bushnell quien se inmolo frente a la Embajada de Israel en EEUU en protesta por el GENOCIDIO SIONISTA
No quiero ser cómplice del genocidio
gritaste Aarón y caminaste hacia el portón de la EMBAJADA DE LA MUERTE
es necesario que todos vean
tu imagen
que todos escuchen tu voz
mientras el combustible
impregna tu ropa
NO QUIERO SER CÓMPLICE DEL GENOCIDIO
dijiste y acercaste el encendedor
al uniforme
hay que ser valiente Aarón para
sacrificarse por el otro
para poner su cuerpo
en el altar
mientras
las cámaras reproducen
una y otra vez el fuego
que te consume
y sigues gritando
NO QUIERO SER COMPLICE DEL GENOCIDIO
Una vida no es existir
sobrevivir a la matanza,
mientras miramos
los cadáveres de los niños de Gaza
eso no es la vida,
y naturalizarlo
es convertirse en la bestia
que nos imponen
desde ese trono de huesos.
No se puede tomar la sopa
mientras vemos como si se tratara de un reality
a las bombas de racimo
dibujando sus raíces
de marfil humeante en el cielo,
no se puede ir al trabajo
mientras las voces de los mártires
nos gritan sus nombres y nos indican en qué fosas comunes
los enterraron,
no sé puede abrazar a su hijo
mientras otras madres
duermen en camillas metálicas
frente a sus hijos que lloran
y se preguntan dónde está el mundo
en esta masacre.
No se puede vivir Aarón
si vemos la fila de ancianos desnudos
con sus ojos vendados
y sus manos atadas con precintos
mientras los sionistas
se sacan selfies
burlándose de sus secuestrados.
NO QUIERO SER CÓMPLICE DEL GENOCIDIO
decís y entre los dolores
de las llamas que trepan por tu humanidad
se dibuja tu vida
y la vida de los miles
de mártires
que vienen a buscarte
y te abrazan.
El imperio de osamentas
se esparce con su estrella
que se clava
en mi palestina herida.
Quizás ahora entiendan
amigo que el fuego
que ellos crearon
también los
consumira.
NO QUIERO SER CÓMPLICE DEL GENICIDIO
tu ejemplo es un grito de guerra
de todo lo humano
que resiste.
Leonardo Herrmann