PROHIBIDO OLVIDAR: LA DEMOCRACIA PUNTOFIJISTA MASACRÓ A “Motilón” JESÚS ALBERTO MÁRQUEZ FINOL.
Hoy 1 de Marzo del 2024 se cumple el 51 aniversario del vil asesinato de «Motilón» aquel 1 de Marzo de 1973 un día jueves.
Jesús Márquez Finol nace un 14 de agosto de 1936 un día viernes en Cabimas, estado Zulia. Su madre, Laura Rosa Finol (Doña Luisa), es costurera y de oficios del hogar. Su padre, Maximino Márquez, chofer y mecánico. Al mudarse a la Villa del Rosario lo inscriben en la Escuela Ziruma. Al verlo, el maestro lo apoda: “El Motilón”. En el liceo Simón Bolívar de San Cristóbal, Táchira, inicia la secundaria y su activismo contra la dictadura de Pérez Jiménez. Luego, estudia Economía en la Universidad del Zulia, se certifica como loc…
Los chavistas no creemos que el camino es la modernización de nuestra economía capitalista dependiente, sino crear un nuevo modelo económico, el comunal, con su propio mercado. Que el empresariado siga con el suyo y haga lo que le corresponde, ya nos veremos más adelante.
2.- Los chavistas no buscamos al emprendimiento, eso es ilusionar al pobre con hacerse empresario aupando el sálvese quien pueda. Es el espejismo de la esperanza.
3.- Los chavistas no hablamos de perfeccionar la convivencia ciudadana, sí de consolidar los tres escalones comunales. Para eso existen -o existían- 46 mil consejos comunales y 3 mil comunas, aunque hayan convertido en cuento a la ciudad comunal.
4.- Los chavistas no necesitamos de superhéroes salvadores, ellos sólo existen en el embaucador sueño norteamericano. Y no queremos que nos depositen bonos de gracia cuando ellos los tengan a bien. Los empleados del gobierno o del empresariado deben tener salarios dignos y justos.
5.- Los chavistas no vamos a seguir con la simulación de la democracia participativa y protagónica, buscaremos la democracia directa, esa que Chávez trató de lograr en el 2007 y el Partido le negó.
6.- Por todo esto los chavistas no queremos continuar en este rumbo de la esperanza incumplida.
7.- Es decir, los chavistas no aceptaremos un candidato que no haya sido designado por el pueblo organizado en esos 46 mil consejos comunales.