Xin chào | Acuerdos con Vietnam

El que vence a los demás es fuerte. El que se vence a sí mismo es poderoso.

Ho Chi Minh

26/04/2024.- A 16 años de la realización de la I Comisión Intergubernamental en materia de cooperación económica, cultural, científica y tecnológica Venezuela-Vietnam, efectuada en el hotel Marriott, al este de Caracas, donde el anfitrión fue el para entonces canciller Nicolás Maduro Moros, se repite la historia del acto de clausura en el salón Simón Bolívar de Pdvsa, con la firma de los respectivos acuerdos y también en presencia Nicolás Maduro.

Dos años antes, el presidente Hugo Rafael Chávez Frías había tocado la puerta vietnamita, el 31 de julio de 2006, para hacer visibles las relaciones diplomáticas de ambas naciones, que formalmente se habían activado en 1989, durante el mandato de Carlos Andrés Pérez. Sin embargo, fue el comandante Chávez quien visualizó esos lazos diplomáticos, tras ordenar la apertura de la Embajada de Venezuela en Hanói, a la vez que el presidente vietnamita Nguyen Minh Triet hacía lo propio, designando como embajador en Caracas a Tran Thanh Hoang.

A siete años de aquel encuentro en Caracas, se produjo otro importante evento en esa búsqueda de acuerdos de cooperación bilateral. Se trató de la III Comisión Intergubernamental en materia de cooperación económica, cultural, científica y tecnológica de ambas naciones.

En aquella oportunidad, Venezuela llevó a Hanói un selecto grupo de funcionarios, encabezado por el vicepresidente para el Socialismo Territorial y ministro de Comunas y Movimientos Sociales, Elías Jaua, mientras que la parte anfitriona hizo lo propio con un equipo presidido por el ministro de Industria y Comercio, Vu Huy Hoang.

Más significativa no podía ser la apertura, escenificada en la centenaria y majestuosa edificación que sirvió de casa de gobierno en los tiempos de la ocupación francesa, ubicada en la histórica calle Ngo Quyen.

Para entonces, el alto funcionario venezolano y miembro de la dirección del Partido Unido Socialista de Venezuela (PSUV), Elías Jaua, arribó con optimismo a la tierra del Tío Ho y se marchó satisfecho por los acuerdos firmados en la sede del Ministerio de Industria y Comercio, con Huy Hoang, quien sostuvo que existían potencialidades suficientes para dar nuevos e importantes pasos para beneficio de ambas naciones.

Venezuela aspiraba a poner en marcha, lo antes posible, acuerdos sobre el cultivo combinado de arroz y peces, la cría de ganado lechero, la fábrica de cabillas de polímeros, la construcción de viviendas, el cambio de tecnología en la elaboración de bombillos ahorradores y la retoma de proyectos como la fábrica de camiones y maquinaria pesada. Esas fueron las metas acordadas para entonces.

El doble discurso gringo

Fresquitos están estos días que muestran dos caras de las relaciones entre dos naciones. Por un lado, la administración Biden hace los esfuerzos por trampear las conversaciones con el gobierno venezolano sobre una supuesta disposición de suspender las medidas coercitivas unilaterales, mal llamadas por ellos sanciones. Por el otro, Vietnam y Venezuela, días después, ratificaron su amistad sincera al firmar cinco acuerdos para dar continuidad la construcción de una economía bilateral beneficiosa para ambos países, con el fin de sumar capacidades con miras a estar a la vanguardia de los desafíos que se presentan en diferentes mercados, según palabras del canciller venezolano Yván Gil.

El más reciente encuentro de Davos, entre la delegación venezolana, liderada por el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, y el secretario de Estado de la Agencia de Seguridad de Estados Unidos, Brian Nickels, para discutir el tema de las medidas coercitivas unilaterales, presentadas por los gringos como secretas, fue todo lo contrario. La misma Agencia de Seguridad se encargó de difundir las resoluciones a los medios internacionales. Mientras, en otro escenario, fresco y sincero, venezolanos y vietnamitas se daban la mano en la firma de acuerdos rubricados fraternalmente en el salón Simón Bolívar de Pdvsa, como hace 16 años, entre el presidente Nicolás Maduro Moros y el vice primer ministro Tran Luu Quang, quien además estuvo acompañado por 70 funcionarios de su país.

Los acuerdos

En el compromiso asumido y firmado en el salón Simón Bolívar de la empresa petrolera venezolana se encuentra la constitución de una empresa mixta destinada a la producción de vidrio entre Venezolana del Vidrio (Venvidrio) y Public Glass, la cual permitirá la proyección industrial de ese sector en el mundo.

De igual modo, se firmó un plan de trabajo integral donde se acuerda la cooperación en materia de producción agrícola para promover y desarrollar la capacitación, la investigación y el apoyo técnico-científico y tecnológico en esta área.

Lo firmado incluye, además, un memorándum de entendimiento Pdvsa/Petróleo y Gas de Vietnam, para que el país indochino venga a extraer petróleo y gas aquí en Venezuela de manera soberana. También, en el área de los hidrocarburos, tiene que ver la petroquímica, pues se estableció una carta de intención Pequiven/Petro Vietnam/Fertilizer and Chemistry Corporation para el desarrollo de la petroquímica en beneficio conjunto.

El cuarto acuerdo trata sobre la cooperación bilateral para el desarrollo de capacidades tecnológicas y de las telecomunicaciones en Venezuela, y el quinto compromiso se refiere a la cooperación bilateral para el desarrollo de capacidades tecnológicas y de las telecomunicaciones en Venezuela.

El ministro del Poder Popular para el Petróleo y presidente de Pdvsa, Pedro Rafael Tellechea, destacó que, durante la firma de los acuerdos, de forma virtual, estuvieron presentes 245 salas virtuales de todo el territorio nacional, y agregó que es un compromiso con la clase trabajadora de la industria petrolera.

El presidente Maduro adelantó que en los próximos días se dará una buena noticia para ambos pueblos, que tiene que ver con la interconexión aérea: «Es posible que tengamos un vuelo directo entre Venezuela y Vietnam. Con este compromiso, le decimos a nuestros hermanos de Vietnam que esta es su casa». El vice primer ministro vietnamita, Luu Quang, por su parte, agradeció la hospitalidad de Venezuela: «Hoy participamos en un evento muy emotivo, exclusivo y participativo. Estos acuerdos con Venezuela van a llevarnos a un nuevo nivel de desarrollo».

Fuera de los autoproclamados «estados iluminados», se produjo un verdadero asombro e incredulidad frente a este desprecio de la soberanía y el derecho internacional. En India, Tailandia y América Latina, la reacción fue bastante uniforme: miedo.

Noam Chomsky

26/04/2024.- A 16 años de la realización de la I Comisión Intergubernamental en materia de cooperación económica, cultural, científica y tecnológica Venezuela-Vietnam, efectuada en el hotel Marriott, al este de Caracas, donde el anfitrión fue el para entonces canciller Nicolás Maduro Moros, se repite la historia del acto de clausura en el salón Simón Bolívar de Pdvsa, con la firma de los respectivos acuerdos y también en presencia Nicolás Maduro.

Dos años antes, el presidente Hugo Rafael Chávez Frías había tocado la puerta vietnamita, el 31 de julio de 2006, para hacer visibles las relaciones diplomáticas de ambas naciones, que formalmente se habían activado en 1989, durante el mandato de Carlos Andrés Pérez. Sin embargo, fue el comandante Chávez quien visualizó esos lazos diplomáticos, tras ordenar la apertura de la Embajada de Venezuela en Hanói, a la vez que el presidente vietnamita Nguyen Minh Triet hacía lo propio, designando como embajador en Caracas a Tran Thanh Hoang.

A siete años de aquel encuentro en Caracas, se produjo otro importante evento en esa búsqueda de acuerdos de cooperación bilateral. Se trató de la III Comisión Intergubernamental en materia de cooperación económica, cultural, científica y tecnológica de ambas naciones.

En aquella oportunidad, Venezuela llevó a Hanói un selecto grupo de funcionarios, encabezado por el vicepresidente para el Socialismo Territorial y ministro de Comunas y Movimientos Sociales, Elías Jaua, mientras que la parte anfitriona hizo lo propio con un equipo presidido por el ministro de Industria y Comercio, Vu Huy Hoang.

Más significativa no podía ser la apertura, escenificada en la centenaria y majestuosa edificación que sirvió de casa de gobierno en los tiempos de la ocupación francesa, ubicada en la histórica calle Ngo Quyen.

Para entonces, el alto funcionario venezolano y miembro de la dirección del Partido Unido Socialista de Venezuela (PSUV), Elías Jaua, arribó con optimismo a la tierra del Tío Ho y se marchó satisfecho por los acuerdos firmados en la sede del Ministerio de Industria y Comercio, con Huy Hoang, quien sostuvo que existían potencialidades suficientes para dar nuevos e importantes pasos para beneficio de ambas naciones.

Venezuela aspiraba a poner en marcha, lo antes posible, acuerdos sobre el cultivo combinado de arroz y peces, la cría de ganado lechero, la fábrica de cabillas de polímeros, la construcción de viviendas, el cambio de tecnología en la elaboración de bombillos ahorradores y la retoma de proyectos como la fábrica de camiones y maquinaria pesada. Esas fueron las metas acordadas para entonces.

El doble discurso gringo

Fresquitos están estos días que muestran dos caras de las relaciones entre dos naciones. Por un lado, la administración Biden hace los esfuerzos por trampear las conversaciones con el gobierno venezolano sobre una supuesta disposición de suspender las medidas coercitivas unilaterales, mal llamadas por ellos sanciones. Por el otro, Vietnam y Venezuela, días después, ratificaron su amistad sincera al firmar cinco acuerdos para dar continuidad la construcción de una economía bilateral beneficiosa para ambos países, con el fin de sumar capacidades con miras a estar a la vanguardia de los desafíos que se presentan en diferentes mercados, según palabras del canciller venezolano Yván Gil.

El más reciente encuentro de Davos, entre la delegación venezolana, liderada por el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, y el secretario de Estado de la Agencia de Seguridad de Estados Unidos, Brian Nickels, para discutir el tema de las medidas coercitivas unilaterales, presentadas por los gringos como secretas, fue todo lo contrario. La misma Agencia de Seguridad se encargó de difundir las resoluciones a los medios internacionales. Mientras, en otro escenario, fresco y sincero, venezolanos y vietnamitas se daban la mano en la firma de acuerdos rubricados fraternalmente en el salón Simón Bolívar de Pdvsa, como hace 16 años, entre el presidente Nicolás Maduro Moros y el vice primer ministro Tran Luu Quang, quien además estuvo acompañado por 70 funcionarios de su país.

Los acuerdos

En el compromiso asumido y firmado en el salón Simón Bolívar de la empresa petrolera venezolana se encuentra la constitución de una empresa mixta destinada a la producción de vidrio entre Venezolana del Vidrio (Venvidrio) y Public Glass, la cual permitirá la proyección industrial de ese sector en el mundo.

De igual modo, se firmó un plan de trabajo integral donde se acuerda la cooperación en materia de producción agrícola para promover y desarrollar la capacitación, la investigación y el apoyo técnico-científico y tecnológico en esta área.

Lo firmado incluye, además, un memorándum de entendimiento Pdvsa/Petróleo y Gas de Vietnam, para que el país indochino venga a extraer petróleo y gas aquí en Venezuela de manera soberana. También, en el área de los hidrocarburos, tiene que ver la petroquímica, pues se estableció una carta de intención Pequiven/Petro Vietnam/Fertilizer and Chemistry Corporation para el desarrollo de la petroquímica en beneficio conjunto.

El cuarto acuerdo trata sobre la cooperación bilateral para el desarrollo de capacidades tecnológicas y de las telecomunicaciones en Venezuela, y el quinto compromiso se refiere a la cooperación bilateral para el desarrollo de capacidades tecnológicas y de las telecomunicaciones en Venezuela.

El ministro del Poder Popular para el Petróleo y presidente de Pdvsa, Pedro Rafael Tellechea, destacó que, durante la firma de los acuerdos, de forma virtual, estuvieron presentes 245 salas virtuales de todo el territorio nacional, y agregó que es un compromiso con la clase trabajadora de la industria petrolera.

El presidente Maduro adelantó que en los próximos días se dará una buena noticia para ambos pueblos, que tiene que ver con la interconexión aérea: «Es posible que tengamos un vuelo directo entre Venezuela y Vietnam. Con este compromiso, le decimos a nuestros hermanos de Vietnam que esta es su casa». El vice primer ministro vietnamita, Luu Quang, por su parte, agradeció la hospitalidad de Venezuela: «Hoy participamos en un evento muy emotivo, exclusivo y participativo. Estos acuerdos con Venezuela van a llevarnos a un nuevo nivel de desarrollo».

Fuera de los autoproclamados «estados iluminados», se produjo un verdadero asombro e incredulidad frente a este desprecio de la soberanía y el derecho internacional. En India, Tailandia y América Latina, la reacción fue bastante uniforme: miedo.

Noam Chomsky

Ángel Miguel Bastidas G.

Fuentes consultadas:

Bastidas G., Á. M. (2017). Xin chào. Hanói: Editorial Thế Giới.

Chomsky, N. (2003). El terror como política exterior de Estados Unidos. Caracas: Alfadil ediciones.