(Foto: Getty Image)
el fundador de Blackwater trama sus próximos pasos
31 Ago 2024.
Mientras que funcionarios del gobierno estadounidense continúan rechazando los resultados de las últimas elecciones, Erik Prince, el fundador del notorio grupo mercenario Blackwater ha publicado un video dirigido a los manifestantes opositores de esa nación, provocando temores de que sus fuerzas militares privadas pudieran involucrarse.
«Sus amigos del norte, aunque no estemos con ustedes hoy, estaremos pronto por allá. Los apoyamos hasta el final», declaró Prince en un video en redes sociales a los manifestantes de la oposición venezolana. Agregó en un pie adjunto al video, publicado en X: «A todas aquellas fuerzas de seguridad, pónganse del lado de la libertad, no del de los gángsters socialistas. Los estamos viendo, y habrá justicia».
Erik Prince, ex Navy SEAL devenido en ejecutivo de seguridad privada, ganó infamia a través de Blackwater, al que Humans Rights Watch acusó de ir «en una embestida mortal» en Irak. La masacre de la Plaza Nour en Baghdad en 2007, donde fueron asesinados 17 civiles, resaltó como un ejemplo lúgubre de la fallida guerra de cambio de régimen en Irak, con un juzgado federal en los Estados Unidos concluyendo que guardias de Blackwater fueron los culpales de los asesinatos.
A pesar de Blackwater convertirse en un activo importante para la administración Bush Jr., su involucramiento en un programa de asesinatos de la CIA y la expansión del grupo en lo que ha sido descrito como el ala privada del ejército estadounidense, había llegado a su final bajo la administración Obama.
Sin embargo, Prince comenzó a escenificar un retorno durante la presidencia de Donald Trump, presuntamente convirtiéndose en alguien cercano a la administración al promover la privatización de la guerra en Afganistán, que ya llevaba décadas. Pero, este resurgimiento fue empañado por un fiasco mercenario controversial en Libia que involucró al señor de la guerra Khalifa Haftar.
De acuerdo a cuatro fuentes citadas por Reuters, en 2019, Prince presionaba a la administración Trump para desplegar un ejécito privado en Venezuela para derrocar al líder socialista, democráticamente electo, Nicolás Maduro. Según consta, Prince pasó meses tratando de asegurar el apoyo político y financiero para ese proyecto.
En 2020, el presidente Trump amnistió a los contratistas de Blackwater condenados por la masacre civil en Baghdad en 2007, a pesar de un memorando del gobierno estadounidense reconociendo que ninguna «de las víctimas era un insurgente, o representaban una amenaza al convoy Raven 23».
Durante la administración Biden, Prince no se ha retirado del foco, provocando temores por tan solo estar esperando el potencial retorno de Trump al poder, para perseguir nuevas empresas mercenarias. Desde entonces lanzó un podcast donde, a inicios de este año, promovió abiertamente la colonización de África y América Latina, manifestando que “llegó el momento de que nos volvamos a poner de nuevo el sombrero imperialista para gobernar estos países». Agregando que era de la creencia de que «se puede decir de esto prácticamente de toda África; son incapaces de gobernarse ellos mismos».
Según el Grupo de Expertos de la ONU que monitorea el embargo de armas a la República Democrática del Congo, las evidencias sugieren que Erik Prince intentó llegar a un acuerdo para desplegar una fuerza mercenaria de 2 mil 500 efectivos en la región de Kivu Norte, rica en minerales, dentro del país devastado por la guerra. El Times inglés también reportó que Prince ha persuadido al gobierno israelí para que compre equipos sofisticados de minería para inundar la centena de kilómetros de los túneles de Hamás en Gaza, poco tiempo después de la erupción de la guerra el 7 de octubre.
Comentando sobre esa infraestructura de túneles, Prince declaró: «Le suministré a los israelíes, completamente paga y donada, la habilidad para inundar Gaza con agua de mar». Sin embargo, a pesar de los esfuerzos israelíes por inundar los estimados 450 kilómetros de túneles debajo de la Franja, el proyecto finalmente fracasó.
Haaretz reveló que Prince tenía acuerdos negociados con Ari Harow, ex jefe de gabinete del primer ministro Benjamin Netanyahu, quien luego se declaró culpable de fraude y abuso de confianza. El medio israelí también reveló evidencias de que Prince tiene «vínculos duraderos con el financista israelí Dorian Barak, otrora socio de Harow».
También se han hecho públicos reportes de que una compañía de seguridad privada pudiera asumir el control del cruce de Rafah entre Egipto y Gaza, relevando de esta responsabilidad a las fuerzas de ocupación. El Times of Israel señaló que «hay negociaciones en curso con una compañía cuyo nombre no sido revelado, que emplea antiguos soldados de élite estadounidenses y que se especializan en asegurar locaciones estratégicas en África y Medio Oriente. Estados Unidos e Israel, de ser necesario, le darán asistencia». Luego Al Mayadeen citó fuentes que alegan que la compañía sería Reflex Responses (R2), de Erik Prince.
El videomensaje publicado por Prince el 17 de agosto sugiere sus intenciones de involucrarse en Venezuela. Dado su extenso historial de involucramiento en zonas de conflicto en todo el mundo, el video pudiera indicar más que un show de solidaridad.
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Originalmente publicado por Mint Press News el 23 de agosto, la traducción para Misión Verdad la realizó Diego Sequera
Robert Inlakesh es un periodista, documentalista y analista político radicado en Londres. Ha reportado y vivido en los territorios palestinos bajo ocupación y es el anfitrión del programa «Palestine Files». Director de El robo del siglo: la catástrofe palestina-israelí de Trump. Se le puede seguir en la cuenta @falasteen47 en X.
— Somos un grupo de investigadores independientes dedicados a analizar el proceso de guerra contra Venezuela y sus implicaciones globales. Desde el principio nuestro contenido ha sido de libre uso. Dependemos de donaciones y colaboraciones para sostener este proyecto, si deseas contribuir con Misión Verdad puedes hacerlo aquí<