Por Freddy Jiménez
Un día como hoy 4 de marzo, en el año 1898, nace el ilustre tocuyano José Pío Tamayo.
Pío Tamayo fue un poeta revolucionario, político, precursor del movimiento marxista en Venezuela. Fue el hijo mayor de José Antonio Tamayo y Sofía Rodríguez. Desde joven incursiona en el periodismo dirigiendo “El Juvenil”, “Saltos Brincos” y “Ayacucho” periódicos en donde desarrolla su accionar político y literario, actividades que impulsó junto a sus fraternos amigos los hermanos Edilio y Alcides Lozada. Sus estudios de primaria los realiza en su Tocuyo colonial para luego trasladarse a Barquisimeto y continuar su educación formal.
A la muerte de su padre asume el control de la hacienda de la familia “El Callao” y la orienta con un nuevo sentido, dando un vuelco a las prácticas agrícolas, adquiriendo nuevas maquinarias, mejorando las condiciones de los trabajadores y sus familias, instalando servicios sanitarios y electricidad para sus casas y para la hacienda.
Fundó el Centro Literario El Tonel de Diógenes convirtiéndolo en un espacio para la poesía, para el intercambio y debate de ideas y para profundizar en la lectura de los grandes clásicos de la literatura como: Aristóteles, Kant, Hegel y Marx.
En 1922 sale del país, pues su vida estaba siendo amenazada por el gobierno del dictador Juan Vicente Gómez, debido a su intensa actividad revolucionaria. Desarrolla un periplo por diferentes países de América entre los que se puede destacar a: San Juan (Puerto Rico), Nueva York (USA), La Habana (Cuba), Barranquilla (Colombia), Panamá, Guatemala y Costa Rica, en donde dejó una imborrable huella periodística, literaria y política, colaborando con periódicos y revistas, y participando activamente en la fundación de organizaciones revolucionarias, como el Partido Comunista de Cuba, entre otras actividades.
Regresa a Venezuela en 1926 continuando su labor periodística en la revista Élite y el periódico Mundial. Participa en la organización de los actos de la Semana del Estudiante en 1928 y, en el acto central de la misma, el 6 de febrero declama su poema “Homenaje y Demanda del Indio” que le trae duras consecuencias por parte del gobierno, declarándolo conspirador, siendo detenido y llevado a la cárcel del Castillo Libertador en Puerto Cabello. De allí saldría 7 años después, en 1935, con su salud completamente deteriorada para morir unos meses después en Barquisimeto el 5 de octubre de 1935.
Fragmentos del poema HOMENAJE Y DEMANDA DEL INDIO, declamado por Pío Tamayo en el Teatro Municipal, el 6 de febrero de 1928
A su Majestad Beatriz I
Reina de los Estudiantes
Sangre en sangres dispersa
almagre oscuro y fuerte
estirpe Jirajara,
cacique Totonó,
-baile de piaches, rezo de quemas-
soy un indio Tocuyo
yo.
(…)
Beatriz del estudiante,
cetro de rebeldías,
corona de futuros;
bajo el patio de auroras de vuestro trono eres
la juvenil canción del amanecer.
El encuentro durmiente al amparo del alma
jubilosa y dinámica de la federación,
hecho viva esperanza
en tu luz de mujer.
Y digan con mis voces palabras de tus súbditos
que es tu reinado, Reina, el único que no hace
cesarismo anacrónico,
en esta nutrida selva de Guaicaipuro,
de Mara y Yaracuy
y del equino trueno
de los cien mil corceles
sobre el que galoparon
libertadas naciones.
(…)
¡Me han quitado mi novia!
La novia que me quiso; ¡mi novia enamorada!
Palabras que se dicen con la pena infinita
de quien ya no podrá volverlas a cambiar…
Que bien decirte tú,
como a mi novia, Reina.
En ti la miro a ella
y al mirarte me acuerdo…
Era de sol su carne y de un frágil metal.
El eco de sus voces era de acero azul.
Estaba hecha de altura. A ti se parecía.
(…)
Pero no, Majestad que he llegado hasta hoy,
y el nombre de esa novia se me parece a vos!
Se llama LIBERTAD!
Decidle a vuestros súbditos
-tan jóvenes que aún no pueden conocerla-
que salgan a buscarla, que la miren en vos,
¡Vos, sonriente promesa de escondidos anhelos!
Vuestra justicia ordene,
Y yo enhiesto otra vez,
-alegre el junco en silbo de indígena romero-
armado de esperanzas como la antigua raza,
proseguiré en marcha,
pues con vos, Reina nuestra,
juvenil, en su trono, ¡se instala el porvenir!
Pío Tamayo
Obra: Pío Tamayo. Plumilla/Cartulina de hilo. 2014.
Autor: Freddy Jiménez.
Colección: Biblioteca Nacional Pío Tamayo. Barquisimeto.