Por: Juan Martorano
…La reforma está tomando los espacios del Poder Popular
A 770 días del inicio de la contingencia en la República Bolivariana de Venezuela producto de la pandemia global de la Covid 19, en la finalización de la semana 110 de esta contingencia, y siendo el domingo 24 de abril de 2022, me voy a permitir formular algunas reflexiones y comentarios que considero este es el momento para hacerlo.
Ayer hubo nueva plenaria del V Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) donde se ha aprobado un nuevo código de ética para la militancia de la referida tolda política. Y más que el contenido en sí de dicha normativa, como ya señalé, espero realizar algunas reflexiones generales, y posteriormente y una vez leído el código, formular mis comentarios al respecto.
El país se encuentra en estos momentos con una estabilidad política envidiable. Nicolás Maduro ha mostrado audacia e inteligencia para ir neutralizando a la extrema derecha guaidosista que en el marco de su estrategia de Estado Dual pretendía destruir nuestro Estado-Nación llamado República Bolivariana de Venezuela. Y con la agenda política electoral en marcha, indudablemente que eso se ha traducido en el incremento de la gobernabilidad y gobernanza en el país.
Desde el año pasado y hasta ahora, ha habido cierta mejoría en el aspecto económico, pero que aún no hay que confiarnos, porque la tarea allí todavía falta.
La contingencia producto de la pandemia de la Covid 19 en Venezuela muestra a Venezuela con cifras dignas de un país de primer mundo. No obstante hay que mantener las precauciones porque el virus puede andar «agazapado».
Pero después de múltiples reflexiones e investigaciones, si me topé con una amenaza colosal en contra de nuestra Revolución y del gobierno que encabeza Nicolás Maduro.
Por ejemplo, la falta de formación política ideológica es una de esas principales amenazas. Ahí estaban los Consejos Comunales como expresión de la toparquía o del gobierno del lugar como lo señaló el Robinson de América Simón Rodríguez. Esas estructuras aunque de momento un tanto desaparecidas constituyen uno de los pivotes del Poder Popular.
En gran parte sucede que por la apatía que tienen muchos de los habitantes de sectores populares, la desidia en esos sectores de esas poligonales donde se encuentran esos Consejos Comunales, unidades de trabajo y comisiones, le dejan el trabajo a un grupito, y de ahí que terminan trabajando solamente dos o tres ( el que maneja los recursos, el que maneja los alimentos y el que maneja cualquier otra clase de beneficios) que se ven obligados a estar allí y trabajar.
Hay grupos interesados en manejar ciertos beneficios como la distribución de los CLAP o de los medicamentos, las cuales en ciertos sectores muchas veces son controlados por líderes negativos (pranes) o las bandas criminales.
Y justamente por esa razón hay consejos comunales que son ficticios, que existen en el papel pero que en la realidad no es así, y esto porque son manejadas por bandas.
Sectores completos están siendo tomados por la contrarrevolución, por los «falsos rojos» como les gustaba llamarlos el Comandante William Izarra, que se meten con el discurso del chavismo, pero en el accionar se puede observar que son reaccionarios, fascistas y contrarrevolucionarios realmente.
Como la comunidad no participa porque hay apatía, lo que ha logrado hacer la reforma o el reformismo si usted prefiere mejor llamarlo así es la de una terrible desmovilización de la gente, de los líderes y lideresas de base genuinos y genuinas.
Esto debe ser profundamente revisado y deben tomarse cartas en el asunto. Por ejemplo, cuando no se hacen cumplir las leyes de sana convivencia, cuando un vecino denuncia algún irrespeto ante las autoridades y estas nada hacen, los consejos comunales nada hacen, se va a las alcaldías a formular denuncias que no son atendidas, se va dejando al denunciante o a la denunciante para que enfrente la situación a lo personal lo que puede devenir en un problema que se ha traducido en el aumento de homicidios y hasta de desapariciones forzadas como la del compañero Carlos Lanz.
Carlos Lanz enfrentó muchísimas roscas y muchísimas situaciones y cabría preguntarse: ¿Cuál de ellas fue la que lo desapareció? Y no lo sabemos hasta el sol de hoy.
En todo caso, la reforma o la contrarrevolución disfrazada de «rojo, rojito» está tomando los espacios. Desde los Consejos Comunales, Ministerios. Por lo que la Presidencia de la República debe cuidarse muchísimo de esto.
El reformismo basado en que muchas personas se creen militantes de la revolución solamente porque están inscritos en el PSUV, forma parte de un Consejo Comunal, asisten a asambleas, forman parte de las comisiones de trabajo, tienen liderazgos y responsabilidades. No solo por esto se es revolucionario o revolucionaria, ni tampoco pretendo con esto descalificar a los camaradas que están en esas estructuras y realmente hacen una loable labor que se las reconozco. Conozco a muchos y a muchas así. Me estoy refiriendo que algunos cuadros en esas estructuras, a la hora de actuar, se evidencian sus tendencias, los grupos y a que intereses obedece. Se alinean con la quinta columna que se encuentran en estructuras de esferas superiores (alcaldías, gobernaciones, viceministerios y ministerios, etc). Y hasta en espacios de la propia Presidencia de la República, es decir de todo el aparato gubernamental.
Ahí es en donde se evidencia la subordinación y la relación de poder, y de ahí que uno observa como ciertos y determinados actores muestran cierta fuerza y relaciones de poder. Sencillamente porque tienen el apoyo «de arriba».
Por eso es que cuando algunos y algunas van a formular alguna denuncia, les dicen: «Háblate con fulano que ese es del equipo político de Zutano». «Ah y quién es ese tal Zutano?» y resulta que Zutano tiene un cargo directivo de una alcaldía, gobernación, viceministerio o ministerio y se ve el aparato de poder funcionando para ciertos y determinados intereses.
Y de ahí viene el desmontaje de las estructuras que buscan fortalecer el Poder Popular, la Democracia Participativa y Protagónica. Porque estas estructuras del Poder Burocrático se quiere tomar todas las atribuciones, rompiendo todos los esquemas y ocupando todos los espacios de los estamentos comunitarios, municipales y estadales.
Por ello vemos integrantes de Consejos Comunales que a su vez forman parte y se subordinan al equipo político de «X», «Y», «Z» con apoyo «desde arriba».
Por ello, cuando la gente se enfrenta dice: «Si la cosa es así, no vengo más a las reuniones. No me voy a buscar un problema con nadie». Y ahí es cuando los líderes genuinos de nuestras barriadas y comunidades se desmovilizan, los espacios son tomados por un grupo de personas que vienen y te dictan la pauta.
El reformismo está tomando los espacios porque el Poder Popular verdadero los está dejando vacíos. Y están quedando vacíos porque «arriba», en los ministerios o el ministro y los que están en la cadena de mando, no están alineados con los cuadros de consejos comunales y comunas.
De ahí que hay que advertir de cómo estas estructuras están desplazando a los líderes genuinos de las bases y este peligroso fenómeno se está dando.
El ejemplo lo tenemos cuando se dan asambleas, por ejemplo. Aparecen unos tercios, una bandita completa pues, de alto nivel, especialistas o «expertos» (de ahí que ya comience a sentir cierta repugnancia por esta palabra). Entran a una reunión donde está un general, un teniente coronel que esperan hacer una reunión con el pueblo y estos «expertos» amenazan, amedrentan y después salen los «padrinos» por allá «arriba» y por supuesto, cuando enfrentan una situación así, se dan dos pasos atrás y uno se retira.
Todos los espacios están siendo desplazados de esa manera y esos grupos manejando la situación a su libre albedrío. No siguen patrones ni leyes ni reglamentos sino los establecidos por ellos mismos.
Y eso se rompe definiendo quienes son los que nos vamos a confrontar con este estado de cosas. No es con el enfrentamiento entre bandas como se resolverá esta contradicción (aunque algunos quisieran que fuese así), sino que la agenda de conflictividad social debe ser capitalizada y liderada por la verdadera izquierda, la Revolución y no por la Reforma para llegar a una verdadera negociación política y evitar males mayores.
De eso espero poder referirme en próximas entregas, porque creo que los revolucionarios y las revolucionarias debemos ser los verdaderos defensores y defensoras del Poder Popular.
¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Independencia y patria socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
Juan Martorano
Abogado, Defensor de Derechos Humanos, Militante Revolucionario y de la Red Nacional de Tuiteros y Tutiteras Socialistas. Www.juanmartorano.blogspot.com , www.juanmartorano.wordpress.com , jmartoranoster@gmail.com, j_martorano@hotmail.com , juan_martoranocastillo@yahoo.com.ar , cuenta tuiter e instagram: @juanmartorano, cuenta facebook: Juan Martorano Castillo. Canal de Telegram: El Canal de Martorano.