El dogma monetarista le va a devolver el poder político a la derecha

Por: Juan Carlos Valdez 

Es impresionante e incomprensible el empeño del equipo económico del gobierno en mantener los salarios a niveles de miseria, cuando todo indica con meridiana claridad, que no hay ninguna razón para mantener los salarios a esos niveles, ni es necesario mantener la contracción del crédito a la producción y al consumo.

Las cámaras de productores y comerciantes tienen al menos tres años señalando que están afrontando dificultades económicas, fundamentalmente por los bajos ingresos de buena parte de la población venezolana*. Esa porción de la población venezolana, que los productores y comerciantes no suelen decir expresamente quiénes son, no son otros que aquellos que dependen directamente del Gobierno: empleados públicos, pensionados y jubilados (entre todos están cercanos a un tercio de la población de Venezuela).

El dogma monetarista es mucho más fuerte que el dogmatismo de las iglesias.

Por más que la realidad le muestra a los que ejecutan las políticas económicas del Gobierno, que la inflación en Venezuela no obedece a que la demanda supera a la oferta, lo que es más que evidente en los lamentos de comerciantes y productores quienes afirman que sus ventas son pocas, ellos siguen congelando los salarios al punto de que el salario, como categoría que representa el triunfo centenario de los trabajadores del mundo y que además es con la cual se dignifica la vida del trabajador, en Venezuela está a punto de desaparecer.

Es por demás evidente que no es el salario lo que hace que los precios suban en Venezuela.

En Venezuela tenemos los salarios más bajos del mundo, con la mayoría de los precios de bienes y servicios más caros del continente y buena parte del mundo.

Está muy claro que los salarios no son el problema. Pero seguramente saldrá un genio a decir que el problema está en que, si le suben el salario a los trabajadores públicos, pensionados y jubilados, toda esa masa de dinero saldrá a comprar dólares y eso disparará el precio de la divisa y la inflación.

El salario de los trabajadores públicos, las pensiones y jubilaciones no han variado desde el 15 de marzo del año 2022 y el precio del dólar oficial, a la fecha de hoy (18/6/2023) ha aumentado en un 527,9%. Por otra parte, según la consultora Ecoanalítica**, este año 2023 están circulando en el mercado venezolano, la cantidad de 4.825 millones de dólares en efectivo. Resulta que la más reciente publicación del Banco Central de Venezuela que expresa a cuánto asciende toda la liquidez en bolívares (M2) que circula en Venezuela, esta cifra alcanza a Bs. 34.609.522.000; si convertimos esta cifra en dólares a la tasa oficial actual, estamos hablando que con esos bolívares sólo podríamos comprar $ 1.281.834.148,14. Vale decir, para poder comprar los dólares que están circulando en el mercado venezolano, se requiere 3,7 veces la cantidad de bolívares que existen actualmente según el BCV. Pero sumémosle a la oferta de 4.825 millones de dólares que circulan en el mercado nacional, $9,738 millones que corresponden a las actuales reservas internacionales, y no sumaremos lo que se supone ingresa por concepto de venta de la producción petrolera actual, ya que el oscurantismo que se tiene con los datos, no permite conocer esa cifra; sin embargo, sabemos que hay ingresos por ese concepto, y por la extracción de oro y otros minerales.

Quedándonos sólo con los dólares que están circulando en efectivo actualmente y con las reservas internacionales, estaríamos hablando que la oferta actual de dólares pudiera estar por el orden de los $ 14.563 millones; eso representa 11,3 veces la cantidad de bolívares que existen hoy en el mercado nacional, y como ya dije, sin contar con los dólares que están ingresando por venta de petróleo, oro, hierro y otros minerales.

Sacamos toda esta cuenta para evidenciar que la subida del precio del dólar en Venezuela no tiene que ver con que la oferta de dólares sea menor que la demanda. La demanda, en el mejor de los casos, es 11,3 veces menor a la actual oferta. Eso partiendo de la hipótesis de que nadie pagara impuestos, ni servicios prestados por el Estado y utilizaran ese dinero para comprar divisas.

Como podemos ver la inflación en nuestro país no es provocada por la sobredemanda de bienes y servicios y tampoco por la sobredemanda de divisas, ya que en ambos casos, la oferta supera abiertamente la posibilidad de compra de los demandantes. En este punto, regresa la pregunta: entonces, ¿por qué suben los precios? La respuesta es sencilla: porque estamos en un tipo de guerra no convencional y una de las armas del enemigo ha sido la manipulación política del tipo de cambio a través de las páginas del dólar paralelo. Pero resulta que el BCV y el equipo económico del Gobierno están convencidos que no existe tal guerra, o al menos creen que no se manifiesta en el ataque a la estabilidad monetaria, aunque sea por esa vía, el mayor daño que recibimos.

Como el equipo económico no cree en la guerra económica, pues aplica los «manuales liberales» para curar el capitalismo en períodos de inflación alta: congelar salarios, incremento del encaje legal, venta barata de nuestras reservas y contracción de la liquidez, entre otras; y cómo la manipulación política del tipo de cambio no está en sus mentes, el paciente se sigue muriendo y ellos siguen aplicando el mismo tratamiento esperando tener resultados diferentes.

¿Cómo podríamos defendernos? Aumentando el salario mínimo del sector público al equivalente a $100, lo que beneficiaría a pensionados y jubilados; indexar el salario a la variación porcentual de la inflación, y para reducir la demanda de dólares, se deben indexar los depósitos bancarios, así se le devuelve al Bolívar, la cualidad que perdió en esta guerra: la de ser reserva de valor. Si se indexan los depósitos, ya la gente podrá ahorrar nuevamente en bolívares y el comerciante que no sea importador, no tendrá necesidad de comprar dólares para proteger sus ingresos, y finalmente, indexar el presupuesto público para que el gobierno pueda cumplir con las metas presupuestadas.

Si el equipo económico del Gobierno sigue creyendo que no estamos en guerra y se siguen abrazando al monetarismo, seremos una verdadera oposición a partir del próximo año, cuando la derecha gane el gobierno

https://www.fedecamaras.org.ve/fedecamaras-bajo-poder-adquisitivo-impide-al-venezolano-comprar-una-vez-a-la-semana/

https://www.cesla.com/detalle-noticias-de-venezuela.php?Id=37147

** https://mundour.com/2023/06/11/sabe-cuantos-dolares-circulan-en-venezuela-segun-ecoanalitica/