GENERAL MANUEL PIAR Y LA BATALLA DE SAN FÉLIX

GIlberto Bruzual Báez

INTERESANTE TRABAJO DE INVESTIGACIÓN DEL DR.JOSÉ CARLOS BLANCO, DOCENTE DE LA UCAB,SOBRE EL JUICIO A MANUEL PIAR

Su nombre completo fue Manuel Carlos María Francisco Piar Gómez, quien nació en la ciudad de Willemstad en Curazao el día 28 de abril de 1774, y pierde la vida el 16 de octubre de 1817 al ser sentenciado en juicio militar a morir por fusilamiento en Angostura, hoy Ciudad Bolívar del estado Bolívar, cuando tenía 43 años de edad. Todavía se debate y comenta en la historia y en la memoria colectiva del pueblo las reales causas de su enjuiciamiento y no las procesales de un juicio de guerra ordenado por Bolívar que muchos han criticado y considerado como uno de los grandes errores que cometió Bolívar, haya sido por venganza o por envidia o liderazgo político-militar.

En el polémico y hasta cuestionado por algunos historiadores, “Diario de Bucaramanga”( manuscrito de 466 páginas) su autor, el que fuera secretario de confianza del Libertador general Luis Perú de Lacroix, militar francés quien perteneciera antes al ejército de Napoleón, le atribuye al Libertador el haberle dicho que”…La ejecución del General Piar que fue el 16 de octubre de 1.817, fue suficiente para destruir la sedición: fue un golpe Maestro en política, que desconcertó y aterró a todos los rebeldes, desopinó a Mariño y a su congreso de Cariaco, puso a todos bajo mi obediencia, aseguró mi autoridad, evitó la guerra civil y la esclavitud del país, me permitió pensar y efectuar la expedición de la Nueva Granada, y crear después la república de Colombia: nunca ha habido una muerte más útil, más política y por otra parte más merecida.”

Años después, el general Perú de Lacroix, alejado de su familia y en estado de pobreza, terminó suicidándose viviendo en París(1837).
Algunos estudiosos de la historia afirman que Piar tenía sus proyectos y ambiciones personales en esa lucha por la independencia y por ello le costaba someterse a las órdenes de Simón Bolívar. También se ha dicho que su juicio de debió a celos políticos, a la rivalidad de liderazgos que veía y sentía el Libertador en el héroe de múltiples batallas y en especial la de San Félix que su triunfo le dio a la causa patriótica un repunte y viraje que le permitió que en el territorio libre de Guayana el mismo Libertador pudiera convocar y celebrar el Congreso de Angostura donde fue designado Presidente y se aprobara además el 17 de diciembre de 1819 la Ley Fundamental que creó la unión de las provincias de Venezuela y de la Nueva Granada con el nombre de República de Colombia, fusión que se consolidó en la Constitución de Cúcuta de 1821.

El padre de Manuel Piar era un marino canario llamado Fernando Alonso Piar y Lottyn y su madre una mujer mulata de nombre María Isabel Gómez. Fue bautizado en la Iglesia católica de Santa Ana en Curazao en 1774 y en el acta aparece como hijo de María Isabel Gómez y no se señala el nombre del padre.

Pasa su infancia en esa isla hasta los 11 años cuando en 1785 su madre junto con él se trasladan a vivir a La Guaira. De sus primeros años de vida no se conoce casi nada ni el nombre de la escuela o colegio donde pudo haber hecho sus estudios primarios en Curazao. Sin embargo, se ha dicho que adquirió una gran cultura por su cuenta; además de hablar el papiamento, dialecto criollo de Curazao, mezcla de varias lenguas, aprendió diferentes idiomas como el español, holandés, francés y el inglés.

Manuel Piar tuvo dos hermanos de nombres Felipe y Juan. Contrajo matrimonio con María Martha Boom (8-4-1798), acto que se celebró en el Castillo de Ámsterdam en Curazao. En la partida de matrimonio de Manuel Piar ambos cónyuges aparecen como naturales de Curazao y Carlos está como segundo nombre de pila (Manuel Carlos), el cual no figuraba en la partida de bautizo. Engendró tres hijos: María Isabel, Juan y Carlota.

No obstante lo señalado de sus datos personales y familiares, sobre este militar patriota se han creado algunos mitos de carácter social y político de transmisión oral y escrita acerca de su origen y lugar de nacimiento. En la memoria colectiva hay quienes afirman que nació en La Guaira, lo cual queda desvirtuado en principio por las partidas de bautismo y matrimonio. También corre la versión, tipo leyenda, de que Piar fue producto de los amoríos secretos de un príncipe de la Casa Braganza
de Portugal, de tránsito en Caracas, y una mantuana caraqueña de la familia Jerez Aristeguieta (pariente de del Libertador) y que apenas nació en Caracas, se lo entregaron a los que aparecen como sus padres, quienes se lo llevaron a Curazao. De eso hasta ahora no hay ninguna prueba, contraria a lo afirmado en las actas religiosas, pues en esa época no existía todavía el registro civil.

El conocido y querido compositor y músico guaireños, Cruz Felipe Iriarte, quien partiera físicamente el 17 de mayo de 2012, en la oportunidad que estuve en su casa, meses antes de su fallecimiento en diciembre de 2011, en La Guaira arriba al final del callejón Salsipuedes con calle Mariño, para obsequiarle mi novela “La Ciudad Dormida en el Limbo”, me comentó que existía una vieja parranda musical, de autor anónimo, que su letra hacía referencia al nacimiento de Manuel Piar en La Guaira. Y no ha faltado quienes han solicitado en las redes sociales al cronista de ese Estado “…que trabaje en una dura cruzada por cambiarle el nombre del Estado en cuestión, y que en vez de llevar el toponímico Guaira, se adopte el nombre de Estado Piar en conmemoración del General en Jefe Manuel Carlos Miguel Piar y Gómez, hijo preclaro de El Cardonal en La Guaira, Cuna Matriz de la independencia como la llamara el ilustre francmasón y escritor guaireño Casto Fulgencio López”.

(ver referencias. N. 1, octavo párrafo).

Sin embargo, el hecho de que Manuel Piar  haya nacido en Curazao, en la Guaira, o en cualquier parte de Venezuela o del mundo, e independientemente también  de que haya sido hijo natural, legítimo, adoptivo o de crianza, o también  de habérsele o no insubordinado a Simón Bolívar, o de haber querido sustituirlo como Jefe Supremo de la fuerza patriótica; o  haber sido mestizo o pardo, mantuano, indio,  negro, etc., en nada de ello le restaría  o le cercenaría su gran obra y lucha por la independencia de Guayana y de Venezuela. Solo es de hacerse cada lector la siguiente pregunta:

¿Si realmente  Manuel Piar fue un mal hijo,  un criminal, un traidor y demás descalificativos y ofensas que  le hicieron  muchos patriotas, entonces ¿cómo es posible que en Guayana  y en Venezuela se le rindan honores y se conmemore su memoria como prócer de la independencia y esté en el Panteón Nacional?  ¿ No sería

eso contradictorio con los valores éticos y sociales que deben tener los pueblos y las personas?

A pesar de todas esas acusaciones y descalificaciones a Manuel Piar se le sigue reconociendo como gran prócer de la independencia, un héroe, entre otras, de las batallas de El Juncal el 27 de septiembre de 1816 en las proximidades de Barcelona, encuentro con el comandante realista Francisco Tomas Morales, y en la de San Félix, enfrentamiento bélico a favor de los patriotas que comentaremos más adelante. En toda Guayana se le rinde tributo en el sector oficial y en el privado, también en las instituciones educativas y en los libros de estudios.

Infinidades de calles, barrios, bibliotecas, centros educativos, etc. en muchos lugares o ciudades de Venezuela llevan su nombre. El aeropuerto de ciudad Guayana en Puerto Ordaz lleva su patronímico y uno de los municipios del estado Bolívar.

Los 11 de abril de cada año en conmemoración de la Batalla de San Félix librada y ganada por Manuel Piar con su ejército patriota, en el Municipio Caroní del estado Bolívar se declara festivo no laborable ese día. En reconocimiento nacional se llevaron, simbólicamente, sus restos al Panteón Nacional (28-4-2022), pues después de su fusilamiento y muerte su cadáver nunca apareció ni se sabe realmente donde fue enterrado. Solo existe una constancia de la ejecución y muerte de Piar suscrita por varias personas,
testigos, que estuvieron presentes en la ejecución, inclusive la del Fiscal acusador general Carlos Soublette, no obstante que él no asistió a la ejecución, pero la firmó. Tampoco existe la partida de defunción que correspondía en esa época expedirla la iglesia Católica, si hubiese sido enterrado en un cementerio católico.

Analizar las causas de su condena a muerte en un consejo de guerra convocado y ordenado por Bolívar, sería objeto de extensos espacios y de mucha tinta, y no es el objeto de esta biografía, sin embargo, al final de nuestro artículo en forma resumida expondremos las tres posiciones sobre el juicio militar a Piar, importante estudio de investigación realizado por el destacado, conocido y apreciado jurista docente universitario de la UCAB, el
Dr. José Carlos Blanco, cuya lectura completa recomendamos.

Participación política y actividad militar de Manuel Piar

Algunas biografías afirman que Manuel Piar tuvo participación en el movimiento independentista conocido como Gual y España en 1897. Hemos tratado de confirmar ese hecho. Revisamos varios documentos que figuran en las obras de los destacados historiadores de La Guaira como Casto Fulgencio López (f) y Luis Oscar Martínez (f), y en la lista de los delatados, presos o expulsados de Venezuela por esa rebelión, no aparece el nombre de Manuel Piar. Ambas obras (monografías) de los citados historiadores se refieren solo al Movimiento Gual y España. No con esto estamos negando el hecho y seguiremos en la investigación.

Más bien en la indagación sobre ese hecho lo que hemos encontrado hasta ahora es que quien colaboró con ese movimiento independentistas dirigido por los guaireños José María Vargas y Manuel Gual, fue la madre de Manuel Piar, Isabel Gómez, quien ejercía en La Guaira, en El Cardonal, el oficio de partera.

El conocido y recordado historiador Rafael Martínez Salas (f), quien fuera cronista de La Guaira, su tierra natal, en su libro “La Guaira Histórica y otros escritos”(1982), sobre esa participación nos dice lo siguiente:

“ En una casa de El Cardonal vivió la comadrona(partera) Isabel Gómez, o María Isabel Gómez, con su hijo menor Manuel Carlos Piar, el futuro héroe de San Félix. Isabel Gómez era mulata. Su hijo había sido reconocido por su padre natural Fernando Piar, nativo de las Islas Canarias. Por eso llevaba el apellido Piar. Como se sabe, Piar fue fusilado por haberse rebelado contra la autoridad del Libertador y, por coincidencia, sus restos, están sepultados en un lugar de Ciudad Bolívar, también llamado “El Cardonal”. Como Isabel Gómez, por su condición de partera tenía contacto con mucha gente, aprovechó esta circunstancia para colaborar con Gual y España, así como con los demás patriotas de 1797, en la primera tentativa de la independencia, fraguada en La Guaira. Descubierta la conspiración y habiendo sabido las autoridades coloniales que Gual y España, después de fugarse, se encontraban alojados en la Casa de Fernando Piar en Curazao, realizaron el 31 de enero de 1798 la ocupación y registro de la casa de Isabel Gómez en El Cardonal, siendo deportada rápidamente a la vecina antilla.

En El Cardonal existió una fortaleza militar y esa población fue uno de los sitios del litoral donde fueron expuestos sobre picotas las cabezas y las manos de algunos de los compañeros de Miranda en su expedición libertadora de 1806. Habían sido ahorcados en Puerto Cabello, luego decapitados y mutilados los cadáveres. También fueron sacrificados en el Cardonal, en 1818, numerosos patriotas pues en ese sitio se aplicaba la pena de fusilamiento. Entre los fusilados por los españoles en El Cardonal en ese año estaba el coronel guaireño Juan de Dios Morales, quien había sido hecho prisionero en el Rincón de los Toros».(p.91)

Asimismo, nos recuerda el citado cronista, que el Cardonal y Punta de Mulatos formaban la parroquia Libertad de La Guaira cuando esta estuvo dividida en tres parroquias: Sucre (parte alta). Bolívar (parte baja) y Libertad (El Cardonal y Punta Mulatos). (p.91).

Ya de adulto Manuel Piar se dedica primero al comercio y en los sucesos del 19 de abril de 1810 se encuentra motivado para la lucha por la independencia de Venezuela.

. Antes de esa fecha en 1807 tuvo experiencia revolucionaria en Haití comandando un buque, como también la había tenido en Curazao. Piar había hecho en Puerto Cabello estudios de navegación y por ello se alista luego en esa fuerza.

En su condición de militar en 1811 fue nombrado alférez de fragata y luego de capitán prestó servicios bajo el mando del general Francisco de Miranda. Con la capitulación de este, Manuel Piar se ve en la necesidad de refugiarse en Trinidad donde mejora su inglés y se reúne con patriotas exiliados como Santiago Mariño, quien también había huido a esa isla con la caída de la Primera República y con quien entabla una estrecha relaciones para organizar una expedición de regreso a Venezuela, y que fue encabezada por Mariño. La Isla de Trinidad
llegó a pertenecer a la Capitanía General de Venezuela pero después fue tomada por los ingleses.

El margariteño independentista Santiago Mariño había estudiado en Trinidad y desempeñado una misión en 1810 que le encomendó el Cabildo de Cumaná.

Mariño en esa isla afianza su relación con Manuel Piar y otros patriotas. Logran organizar una expedición en la pequeña Isla de Chacachacare en las cercanías de Trinidad, entre esta y Guiria de la Costa en el golfo de Paria, para invadir el oriente de Venezuela.

Acta de Guerra de Chacachacare

Comenzando el año de 1813, el día once, antes de iniciar la expedición sus participantes suscriben la llamada Acta de Guerra de Chacachacare, la cual hacía referencia, entre otras consideraciones, a la violación por parte del jefe militar Domingo Monteverde, de la Capitulación firmada con Francisco de Miranda en fecha 25 de julio de 1812, cuyo incumplimiento lo que había traído era persecución, cárceles y secuestros y que, por lo tanto, impulsados por un sentimiento de profundo patriotismo, resolvían expedicionar sobre Venezuela con el objeto de salvar a la patria de la dependencia española y restituirle la dignidad de nación que el tirano Monteverde y su terremoto le arrebataron.

En el Acta declaran también que empeñan su palabra de caballeros de vencer o morir en tan gloriosa empresa, asimismo se señala que de ese compromiso ponen a Dios y a sus espadas como testigos y nombran como Jefe Supremo al coronel Santiago Mariño. En el Acta aparece como presidente de la Junta constituida Santiago Mariño; asimismo, figura como uno de los varios secretarios que se nombraron Manuel Piar y como participantes en la expedición viajan, entre otros, Santiago Mariño, Manuel Piar, Juan Bautista Bideau, Manuel Valdés Bernardo y José Francisco Bermúdez, Francisco Azcue para un total de 45 hombres patriotas.

La expedición invade la costa oriental de Venezuela y toman las poblaciones de esa región, entre ellas, Irapa, Yaguaraparo, Río Caribe, Carúpano y Cumaná. Por su parte. Simón Bolívar emprende la llamada Campaña Admirable desde Cúcuta y la finaliza con la toma de Caracas.

En esa campaña Bolívar en Trujillo el 15 de junio de 1813, dicta su famoso Decreto de Guerra a Muerte, el cual estuvo vigente hasta el 27 de noviembre de 1820 en que se reunió con Pablo Morillo en Santa Ana de Trujillo para firmar el Tratado de Armisticio y Regularización de la Guerra ( dos acuerdos).

Mas adelante ,en cuanto a las actividades de Bolívar en la lucha por la independencia, de Jamaica viaja en 1815 a Haití llegando a los Cayos de San Luis. De allí se traslada a Puerto Príncipe donde se reúne el 2 de enero de 1916 con el presidente de ese país
Alejandro Petion, quien le dio apoyo(fusiles
municiones, etc.) para realizar la invasión a Venezuela, que hoy se conoce como “Expedición de Los Cayos” porque partió de ese sitio el 31 de marzo de 1816.

Manuel Piar acompaña a Bolívar en esa acción naval y también Santiago Mariño, Luis Brion, Carlos Soublette, el irlandés Gregor MacGregor, Pedro León Torres, Bartolomé Salom, Francisco Antonio Zea, Pedro María Freites, Pedro Briceño Méndez y Diego Ibarra,

En la actividad militar de Manuel Piar a favor de la independencia, en resumen podemos exponer lo siguiente:

Influido por su padre que fue marino, Piar hace estudios de navegación en una escuela náutica en Puerto Cabello pero además fue un experto, estratega, en las acciones de fuerzas terrestres.

En 1804 participa como miembro de la Guardia Nacional de Curazao en acciones militares contra los ingleses y luego en Haití en un buque de guerra en apoyo a la independencia de esa isla.

Después de la independencia de Venezuela, y declarada el 5 de julio de 1811, en diciembre de ese mismo año Manuel Piar está al frente de una lancha cañonera que forma parte de la concentración patriótica de Cumana para iniciar las acciones bélicas contra la provincia de Guayana que continuaba en poder de los realistas.

Participa en la batalla de Serondo que se llevó a efecto contra las fuerzas navales realistas en el río Orinoco el día 26 de marzo de 1812.

Como se apuntó, estando
bajo las órdenes de Francisco de Miranda en Puerto Cabello, al darse la capitulación de este, Piar tiene que refugiarse en la isla de Trinidad, la cual había pertenecido a la Capitanía General de Venezuela.

Luego de la invasión a Venezuela por la partes costera oriental( enero, 1813), como se había acordado en el Acta de Chacachacare, el 20 de marzo de 1813 a Manuel Piar le toca defender la ciudad de Maturín que había sido atacada por el gobernador de la provincia de Cumaná Lorenzo Fernández de la Hoz y el 11 de abril de 1813 por la fuerza realista comandadas por Remigio Bobadilla y Antonio Zuazola.

Recuperada y libertada la zona oriental de Venezuela, Manuel Piar, ya con el grado de Coronel, organiza la flota naval que le permitió a los patriotas derrotar a las naves realistas en la bahía de Puerto Francés (, hoy municipio Brion del estado Miranda) y Chuspa (hoy población de la parroquia Caruao del estado La Guaira) el 13 de noviembre de 1813, victoria patriota que le facilita después a Manuel Piar finalizando ese año lograr el bloqueo marítimo de Puerto Cabello y la toma de la plaza fuerte de esa ciudad, con apoyo de la fuerza terrestre patriótica , que estaba en poder de los realistas, y así facilitar el nacimiento de la llamada segunda república.

Siguiendo con el resumen de algunas de sus acciones más importantes , y no todas, Manuel Piar en encuentro bélico con el ejército realista comandado por José Tomás Boves, es derrotado por este el 16 de octubre de 1814 en la sabana de El Salado sitio ubicado frente a la ciudad de Cumaná, y más adelante ya en el año de 1816, el 27 de septiembre logra el triunfo en la conocida batalla de «El Juncal», cuya fuerza contraria fue dirigida por Francisco Tomás Morales, victoria clave e importante para la liberación de Guayana con la toma, primero ,de las Misiones del Caroní y luego con la batalla de San Félix el 11 de abril de 1817.

Manuel Piar, durante la guerra de independencia de Venezuela participó en más de veinte(20) enfrentamientos o batallas contra las fuerzas realistas y en casi todos resultó victorioso. Sin embargo, el día 16 de octubre de 1814 en el sitio conocido como El Salado, frente a la ciudad de Cumaná, fue vencido por el comandante realista español (Asturias) general José Tomás Boves, conocido también por el apodo de “El Urogallo” y “la Bestia a caballo”, quien muriera al poco tiempo en combate en la batalla de Úrica, el 5 de diciembre de ese mismo año, a los 32 años de edad.

Al principio Boves estuvo con los patriotas pero luego se unió al ejército realista comandado por Domingo de Monteverde. Se le ha considerado como uno de los militares más sanguinarios de los realistas.

Piar, en ese encuentro con Boves, en la sabana de El Salado tuvo que huir hacia Maturín.

En 1815 Manuel Piar es ascendido a general de división.

El 27 de septiembre de 1816, el general Manuel Piar libra y vence a las fuerzas realistas, que estaban bajo las órdenes Francisco Tomás Morales en la batalla de “El Juncal”, quien logra escaparse para Clarines. Piar comienza a preparar la toma de Guayana para liberarla y para ello se reúne con Manuel Cedeño para coordinar las acciones. Se dirigen a Angostura y no logran tomarla sino después de la batalla de San Félix.

Manuel Piar, después de haberse posesionado de las misiones del Caroní, el 11 de abril de 1817 triunfa en la llamada Batalla de San Félix, enfrentamiento con el ejército realista comandado por el general Miguel de La Torre a quien logró derrotar, acción patriótica que conllevó, prácticamente, a la liberación de la provincia de Guayana donde se estableció el gobierno republicano presidido por Simón Bolívar y la creación de Colombia, todo ello a través del Congreso de Angostura, el cual también sancionó la Constitución de 1819. Esa unión sería consolidada en el llamado Congreso de Cúcuta que sancionó la Constitución de 1821.

Batalla de San Félix

El historiador y educador venezolano, Licenciado en educación Ángel Fuguet Acosta(2004) narra el panorama y situación político y militar anterior a la Batalla de San Félix librada y ganada por el general Manuel Piar y que luego con el apoyo naval dado por el Almiranta Brion en el Orinoco queda liberada totalmente la Provincia de Guayana, zona estratégica positiva para la liberación de Venezuela, pues, en esa región estaban las misiones de Guayana, atendidas por los capuchinos, era rica en agricultura y ganadería, fuente importante para el mantenimiento del ejército patriota y el gobierno de la República libre asentado en Guayana.

El panorama político y militar en Guayana y en oriente expuesto por Fuguet antes de la batalla de San Félix, el cual sintetizamos para los efectos de este punto, es el siguiente:

A finales del año 16, el coronel Manuel Cedeño atraviesa el Orinoco donde logra consolidar un fuerte escuadrón de caballería; por su parte, el general Manuel Piar después del triunfo de El Juncal (27-9-1816, cerca de Barcelona) ,abre operaciones en torno a Angostura pero sin resultados positivos. A mediados de noviembre Piar se traslada a Caicara del Orinoco donde Cedeño ejerce un claro dominio de esa región. Llegan a un acuerdo y unifican sus fuerzas y Piar asume la jefatura y Cedeño queda como su lugar teniente.

Para el primero de enero de 1817, ellos con su tropa patriótica se encuentran en la confluencia del Caura y del Orinoco, y ante el enemigo realista en forma estratégica logran apoderarse de una embarcación de estos, y con la que llevaban logran atravesar el río y el ejército realista sin atacar, más bien huye hacia Angostura y el ejército patriota los persigue pero no logra alcanzarlo.

Para el 12 de enero Piar y Cedeño están frente a Angostura, atacan pero son repelidos, y no logrando el objetivo deciden continuar río abajo en búsqueda de la confluencia de los ríos Orinoco y Caroní.( p. 96).

Por otra parte, la situación de Bolívar en Barcelona era angustiosa y nada fácil y decide acoger la sugerencia de probar suerte en el sur, que le hiciera Piar, y él mismo se convence de la importancia de Guayana para la causa republicana, de despojar a los realistas de los cuantiosos recursos agropecuarios de que disponían las Misiones del Caroní y lo ideal para establecer la capital provisional de la Republica, a despecho de la vulnerabilidad de que adolecía Caracas, además, la importancia el eje fluvial Orinoco-Apure-Arauca para garantizar una excelente vía de comunicación con el exterior, con el resto del país y con la Nueva Granada. Simón Bolívar el 25 de marzo de 1817 emprende su campaña del sur para unir su ejército a las fuerzas de Piar y Cedeño.(p. 97).

Continuando su relato histórico, después del paréntesis sobre Bolívar, el historiador Fuguet apunta que Piar y Cedeño después de pasar por la confluencia del Caroní y el Orinoco se dirigen con su ejército a las Misiones del Caroní, bajo el fuego de la tropa relista, pero logran vencer y se apoderan de ellas y encarcelan a los 41 misioneros que hay en el convento de Caruachi. José Félix Blanco (sacerdote capellán el ejército patriota) es nombrado administrador de ese emporio agropecuario . Luego los jefes patriotas entran a Upata el 12 de febrero de 1817y allí establecen su cuartel general. Hicieron un intento pero no pudieron tomar a Angostura.( p.97).

Ya Bolívar el 3 de abril de 1817 se encuentra en la Cruz, un puerto cerca a Soledad, población situada frente a Angostura. En la noche del 4 de abril en un sitio identificado como La Mesa, casi frente a la ciudad de la nombrada ciudad de Angostura, se da el encuentro entre Bolívar y Piar y los dos ejércitos patriotas. Al día siguiente se enteran que el realista, general La Torre, y su ejército han salido a reconquistar a las Misiones; entonces, el general Piar y el grueso de las fuerzas patriotas salen a perseguir a los realistas. ( p.98).( Fin de la referencia del historiador Fuguet).

El encuentro del 11 de abril en la Mesa de Chirica cerca de San Félix

El general Miguel de la Torre, comandante de la fuerza realista había fijado su centro de operaciones cerca de San Félix y los patriotas venían de Upata.

Al final, el encuentro que se conoce como Batalla de San Félix, entre los dos ejércitos enemigos, se dio el 11 de abril de 1817 en la Mesa de Chirica, cerca de San Félix, hoy perteneciente al municipio Caroní del estado Bolívar. El ejército patriota fue comandado por el general Manuel Piar y el realista, por Miguel de La Torre.

Acerca del número de soldados de cada fuerza, existen cifras diferentes. Se habla de que el ejército patriota estuvo conformado por unos 2.200 combatientes, aproximadamente: 500 fusileros, 800 lancero, 500 indios flecheros y unos 400 soldados jineteros, y el frente realista, por unos 1800 hombres.

Otros autores hablan de 1.300 el número de combatientes realistas y por parte de los patriotas unos 1.700; lo cierto es que en los diferentes números que se dan a conocer, el ejército patriota tenía una ventaja sobre al español, no obstante que una guerra o batalla no se gana por la cantidad de soldados que se tenga sino por otras variables, como pudieran ser las estratégicas, la calidad y el buen uso de los equipos bélicos, la disciplina, la motivación, o las circunstancias y condiciones existentes en un momento dado, y otros dirían que hasta la suerte pudiera ser un elemento determinante o decisivo para lograr un triunfo, no solamente en lo militar sino en cualquier campo de la vida.

Pero lo cierto es que la batalla tuvo poca duración, entre 30 y 60 minutos (algunos precisan 30 minutos) y el general Manuel Piar como comandante de la fuerza patriota que la libro y ganó salió triunfador. El ejército español huyó hacia Angostura, el cual fue perseguido por una parte de la tropa patriótica sin poderlos capturar.

El Dr. Manuel Donis Ríos, docente e investigador de la UCAB, acerca de la importancia del triunfo de Piar en la batalla de San Félix, que pasó sobre la mesa,según sus propias palabras, comenta lo siguiente:

(…) la victoria de San Félix alcanzada por Piar, resulta ser una de las más importantes de nuestra independencia y de incalculables consecuencias estratégicas. Por supuesto, en la historiografía tradicional, hecha en buena parte alrededor de la figura de Bolívar, este hecho bélico «pasa por debajo de la mesa «, ya que su ejecución no correspondió al Libertador, siendo su conductor el general en jefe, Manuel Carlos Piar, fusilado, además, el 16 de octubre de 1817 en Angostura bajo los cargos de conspiración, rebeldía y deserción.( El UCABISTA, abril 1997).

Por otra parte, en uno de los capítulos(22) del libro “ Simón Bolívar, el Libertador” escrito en 1910 por el historiador militar ingles Francis Loraine Petre, el cual consultamos en la obra publicada por la Biblioteca Ayacucho en 1983, Caracas, el referido autor, sobre el fusilamiento del general Manuel Piar, expone que:

“ La ejecución del infortunado Piar es uno de los cargos favoritos que aducen contra Bolívar los enemigos del héroe. El mulato fue, en realidad, un intrigante. El aspecto más peliagudo de su insurrección fue, como ya dijimos, el despertar sentimientos de raza. Si hubiera tenido éxito en su rebelión de la pardocracia contra los patriotas blancos, si hubiera introducido ese elemento de discordia entre los
Independientes, es posible que la guerra habría tomado un carácter aún más sanguinario. Sin embargo, queda aún la sospecha de que Bolívar fusilara a Piar para salir de un rival más temible que Mariño o Bermúdez”.(p.89).

Después de la batalla de San Félix, triunfo que lo llevó a general en Jefe , concedido por el Libertador, hubo una aparente reconciliación entre Bolívar y Piar, entrevista, diríamos, que fue más protocolar que de entendimiento y sinceridad. En ella Piar le manifiesta a Bolívar su deseo de retirarse del servicio militar para dedicarse en Curazao a otras actividades, sin embargo, continuó por su cuenta la lucha de independencia y sin acatar las órdenes y planes de Bolívar.

Al libertador le siguen llegando informaciones por enemigos de Piar o adversarios patriotas de sus planes personales, de su insubordinación y querer desplazarlo en su máxima jefatura.También le atribuyen a Piar haber ordenado la matanza de los misioneros de Guayana que estaban presos, cuestión que históricamente no ha sido comprobada, lamentable hecho llevado a efecto por algunos de los patriotas que quedaron al frente de las Misiones del Caroní y por los mismos indios que, según se dice, adversaban a los misioneros por su mal trato hacia estos. Tampoco Bolívar había ordenado esa acción de matar a los misioneros sino era partidario que les aplicaran otras sanciones.

Informado de su actuación, Bolívar da la orden para que Piar se presentara a su centro de operaciones situado en San Miguel (presumimos que ese centro de operaciones haya sido en la población de San Miguel de Guanaguana hacia San Antonio de Maturín),con el objeto de que respondiese personalmente de la supuesta conspiración e insubordinación, pero lejos de acatar las instrucciones del Libertador, se marchó a Maturín donde trató de ganarse el apoyo de Santiago Mariño, quien finalmente se lo negó.
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El general en Jefe Manuel Piar fue arrestado por Manuel Cedeño el 27 de septiembre de 1817 en Aragua de Barcelona. Sometido a juicio militar, Consejo de Guerra fue condenado a morir fusilado, sentencia que fue ejecutada el 16 de octubre de 1817(5pm) en la plaza pública de Angostura. El acta de ejecución fue dada a conocer al día siguiente sin saberse donde lo enterraron, tampoco nunca apareció el acta de defunción. En esa época el registro civil (nacimiento, matrimonio y defunción…) era llevado por la iglesia católica en sus respectivas parroquias eclesiásticas.

Su cadáver nunca apareció, como se dijo, y por ello el acto protocolar de ingreso de los restos de Piar al Panteón Nacional de Venezuela fue simbólico ( 28-4-2022).

Miembros del Consejo de Guerra que condenó a Manuel Piar

El Consejo de Guerra que condenó a muerte al General en Jefe Manuel Piar estuvo conformado de la siguiente manera: Presidente, el Almirante Luis Brion. Vocales:
los generales de brigada Pedro León Torres y José Antonio Anzoátegui, y los tenientes coroneles Judas Tadeo Piñango y Francisco Conde. El general de brigada Carlos Soublette actuó como acusador, y el teniente coronel Fernando Galindo fue el defensor de Piar. El 15 de octubre de 1817 el Consejo de Guerra designado sentenció al general en jefe Manuel Piar a la pena de muerte, condenándolo por los delitos de insubordinación, deserción, sedición y conspiración. El Libertador ratificó la decisión pero sin que fuera degradado, sentencia que fue ejecutada el día 16 de octubre de 1817 (5pm) cuando Piar fue fusilado frente al muro del costado occidental de la catedral de Angostura, al lado de la hoy plaza Bolívar de Ciudad Bolívar.

Es de observarse que el acusador de Piar en ese Consejo de Guerra, Carlos Soublette, era pariente cercano de Simón Bolívar, aparte de haber sido hombre, militar de su confianza; asimismo, el padre del fiscal llevaba el Piar como segundo apellido, pues se llamaba Antonio Soublette y Piar, natural de la isla de Tenerife de España y de Teresa Jerez de Aristeguieta, ambos emparentados con el Libertador.

El juicio al general Manuel Piar

En el interesante e importante trabajo de investigación intitulado “El juicio al general Manuel Piar: tres tesis guayanesas sobre su polémico proceso judicial” (2018), del conocido y destacado jurista y docente de la UCAB, Dr. José Carlos Blanco, quien fuera juez, director de la Escuela de Derecho de esa institución en Guayana y su director de Postgrado, estudia y analiza tres obras escritas por profesionales guayaneses dedicados al estudio de la historia como son las tesis que sostienen Ovidio Figueroa, Omar Duque Jiménez y Rafael Marrón,sobre ese juicio: la del asesinato del general Manuel Piar; la de Piar como el libertador de Guayana y la tesis del juicio justo a Piar, respectivamente.

Opina el profesor Blanco que”… el hecho de que Bolívar no haya actuado correctamente en el caso Piar, no quita la majestad al resto de su obra; o que Piar haya traicionado a Bolívar cometiendo actos que provocaron su fusilamiento, tampoco desfigura todos sus esfuerzos y aportes por la independencia de Guayana”.

Del valioso trabajo del profesor Blanco, expondremos solo algunos tópicos analizados por él y sus conclusiones, y recomendamos su lectura completa en la Revista digital de la UCAB Guayana Moderna.(Nro 7. 2018).
Expone el profesor Blanco que en la tesis del asesinato del general Piar, Ovidio R. Figueroa Salazar se levanta contra la tesis de la traición o crímenes de que se le acusó y declaró culpable al general Piar para fusilarlo; considera Figueroa que este fue víctima de envidias y odios políticos, cultivados por subalternos que cuestionaban su manera de ser y veían con preocupación que su autoridad crecía, llegando a competir en prestigio con el jefe Supremo y que no duda de que la ejecución de Piar fue un asesinato, perpetrado mediante un teatro muy bien montado por Bolívar, para elimínalo como rival y aprovecharse de su obra para obtener la liberación de Venezuela.

Luego el profesor investigador José Carlos Blanco analiza la tesis de Piar como el libertador de Guayana de Omar Duque Jiménez, quien si bien no observa el proceso a Piar y la actuación de Bolívar como lo refiere Ovidio Figueroa, se inclina hacia la idea de que el héroe de San Félix fue injustamente ejecutado, en virtud de una sentencia injusta, dictada en un juicio mal llevado.

En la tesis del juicio justo, apunta el profesor Blanco, que Rafael Marrón González considera que fue un juicio justo y que no comparte la tesis de que Piar fue víctima de manipulación emboscada que le montaron Bolívar y sus seguidores para eliminarlo. Opina el periodista Marrón que Piar fue responsable de los hechos que le imputaron, justamente juzgado y en consecuencia fusilado. Afirma, además, que el caso Piar ha servido a los detractores de Bolívar para descalificarlo moralmente y presentarlo ante la historia como un perverso asesino, que, por envidia, eliminó a Piar.

Conclusiones jurídicas y éticas sobre el juicio a Piar

En las conclusiones jurídicas y éticas sobre el juicio a Piar, el profesor José Carlos Blanco en su interesante e importante trabajo de investigación expone lo siguiente:

“Después de haber analizado tres interpretaciones diferentes sobre el proceso a Manuel Piar, debemos concluir con unas consideraciones que fijen nuestra posición al respecto.

Entre las actividades humanas que producen más polémica, están indiscutiblemente los juicios. La valoración ética de los mismos es difícil, porque en la mayoría de las oportunidades siempre nos encontraremos con opiniones divididas en cuanto a la justicia intrínseca de las decisiones. Alf Ross en su obra sobre el derecho y la justicia dejo dicho que “la justicia es algo ajeno al derecho: un sentimiento”. (Ross, 1963, p. 286).

En este orden de ideas, cuando analizamos las opiniones que se producen sobre las sentencias hay que comenzar por aclarar, quién opina, por qué opina y para qué opina. En este caso se había analizado las opiniones de simpatizantes de Bolívar como hemos podido observar. Son totalmente diferentes. Ahora bien, ¿puede intentarse un análisis objetivo sobre el juicio?, es difícil pero vamos a intentarlo, dividiendo lo jurídico de la moral; división que no es fácil pero puede ser útil para esclarecer sobre un hecho que ha marcado la historia de Guayana.

Análisis jurídico del proceso.

Figueroa y Duque Jiménez concluyen que Piar fue victimado por un juicio amañado, que dista mucho de un proceso justo. Rafael Marrón opina todo lo contrario. Analicemos los aspectos positivos y negativos del juicio, dejando claro que lo hacemos con la limitación de las características particulares de la documentación que tenemos a la mano. No conocemos el derecho procesal aplicable en aquel momento – que científicamente no era como el proceso moderno para determinar si el proceso se ajustó a él. Sin embargo, sí podemos resaltar a su favor lo siguiente:

1.1. Lo positivo.
Tomando en consideración las circunstancias en que se desarrolla el juicio, en plena guerra de independencia en 1817, no podemos dejar de reconocer que el mismo tuvo aspectos positivos:

  • Se le nombra un defensor al reo, lo que cumple con la garantía de tener asistencia de letrado. Cargo que ejerció el General Galindo.
  • Fue oído en el proceso. Piar fue interrogado por el Fiscal, contestando y rechazando los cargos que se le imputaban.
  • Se le permitió aportar pruebas y controlar las que se estaban presentando en su contra. Aquí es importante acotar que Piar no tacho a los testigos, por lo tanto, los argumentos de enemistad y predisposición que esgrimen algunos historiadores deben ser desechados.
  • Presentados los cargos, su defensor tuvo la oportunidad de presentar una defensa importante que a juicio de muchos ha sido calificada como genial.

Hasta aquí, y coincidiendo parcialmente con Marrón González, exponemos lo que consideramos como aspectos positivos del proceso.

1.2. Lo negativo.

Del mismo modo que se reconocen los aspectos positivos del proceso hay que destacar aquello que arroja dudas sobre el mismo. Las circunstancias en que se constituye el Tribunal, la valoración de la confesión del reo, las declaraciones de los testigos y la desproporción de la pena. Veamos:

  • El tribunal no ofrecía muchas garantías de imparcialidad. El Primer requisito para considerar que hay un proceso justo, es la imparcialidad del juzgador. Aquí tenemos que destacar que los jueces eran oficiales que estaban indiscutiblemente influenciados por el decreto qué dicto el Jefe Supremo el 5 de agosto de 1817, donde se produce una dura condena moral y jurídica a Piar.
  • Se hizo una indebida valoración de la confesión, porque Piar no acepta totalmente los cargos, reconoce que no acudió ante el llamado de El Libertador pero niega los demás crímenes que se le imputaban.
  • En cuanto al hecho de no haber recusado a los testigos, Piar dijo que no dudaba de su persona pero negó lo que declaraba en su contra.
  • Por otro lado, como bien destaca Jiménez, los testigos no son confiables porque en sus declaraciones se evidencian signos de hiperamplificación y uniformidad, es decir, hablaban demasiado sobre la culpa de Piar y había mucha similitud en lo que cada uno declaraba.
  • No se analiza la excusa de Piar, cuando dijo que no atendió el llamado porque injusta y públicamente fue calificado como un ladrón, amenazándolo inclusive de muerte.

•Indiscutiblemente que la sentencia fue desproporcionada. Consideramos que había elementos para juzgar a Piar, porque como dice Marrón González la deserción era motivo de condena a ser fusilado por traición. Pero en el caso de Piar estaba el atenuante antes expuesto: había sido públicamente amenazado de muerte. Ante esta situación lo procedente hubiera sido condenarlo pero a una pena menor, no a la muerte. Esto explica la reacción de Piar ante la sentencia: esperaba una expatriación pero nunca un fusilamiento.

Análisis Ético.

Además de las consideraciones jurídicas antes señaladas hay hechos que no tienen explicación moral. Vamos a destacar tres, que más allá de los procedimientos legales, arrojan muchas dudas sobre las intenciones de los oficiales encargados del proceso:

  • ¿Por qué un reo de tan alto rango no fue trasladado ante un Tribunal para leerle los cargos en presencia de los jueces? Ni siquiera el Fiscal estuvo presente en ese importante acto.
  • ¿Por qué tanta celeridad en la ejecución?: la sentencia fue notificada a las 6 de la mañana y Piar fue ejecutado a las 5 de la tarde. Esto contradice lo que escribe Bolívar en carta del 4 de septiembre cuando asomó la posibilidad de someter el rigor del fallo a la consideración de los oficiales y el pueblo.
  • ¿Dónde fue enterrado Piar? cómo es posible que un personaje tan importante no haya recibido digna sepultura, porque nada se sabe sobre cómo y dónde fue enterrado. Se presume que fue de noche, según la narración de sus últimas horas, pero todo es un misterio el paradero de su cadáver. Estas son dudas que surgen de circunstancias inexplicables. También se debe destacar que en un documento que ha sido objeto de críticas, como es el Diario de Bucaramanga de Perú de La Croix, al narrar lo acontecido el 25 de mayo de 1882, se pone en boca de Bolívar lo siguiente:

“la muerte del general Piar fue entonces de necesidad política y salvadora del país. Porque sin ella iba a empezar la guerra de los hombres de color contra los blancos, el extermino de todos ellos y por consiguiente el triunfo de los españoles: que el general Mariño merecía la muerte como Piar, por motivo de su disidencia, pero su vida no presentaba los mismos peligros y por eso mismo la política pudo ceder a los sentimientos de humanidad y aun de amistad por un antiguo compañero. Las cosas han mudado bien de aspecto –continuó diciendo el Libertador- entonces la
ejecución de Piar, que fue el 16 de octubre de 1817, fue suficiente para destruir la sedición; fue un golpe maestro en política, que desconcertó y aterró a todos los rebeldes, desopinó a Mariño y su congreso de Cariaco; puso a todos bajo mi obediencia, aseguró mi autoridad, evitó la guerra civil, y la esclavitud del país, me permitió proyectar y efectuar la expedición a la Nueva Granada y crear después la Republica de Colombia: nunca ha habido un muerte más útil, más política y, por otra parte, más merecida. Pero hoy repito, las cosas han cambiado: la muerte de un criminal en 1817 fue suficiente para asegurar el orden y la tranquilidad, y ahora en 1828 no bastaría la muerte de muchos centenares.»

¿Dijo Bolívar estas palabras? Como advertí, se cuestiona el valor histórico del Diario de Bucaramanga, pero esto añade otra duda más sobre el polémico caso, que nos trasladaría al análisis político. Como puede leerse anteriormente, Figueroa destaca la envidia de El Libertador hacia Piar, pero no es descartable que, al margen de las bajas pasiones, el proceso estuviera marcado por un importante cálculo político, que pudo ser determinante al momento de la condena y en vez de la simple expatriación se inclinó por la pena de muerte.

Sin llegar a exagerar, creemos que el juicio a Manuel Piar puede incluirse entre los procesos celebres de la historia de la humanidad. La prueba de esto es la cantidad de opiniones diferentes que se han producido sobre aquellos días del mes de octubre de 1817 y lo que indiscutiblemente envuelve: juzgar a Bolívar.

Este trabajo aborda específicamente la opinión de tres guayaneses contemporáneos ¿Por qué? Porque en Guayana hay un sentimiento que debe tener una explicación: el piarismo; el indiscutible culto a la figura de Manuel Piar. En ninguna parte de Venezuela se vive esta pasión como en las calles de San Félix o Ciudad Bolívar. Hasta el arte se ha ocupado del héroe fusilado, como se puede apreciar la obra de teatro de Mimina Rodríguez Lezama: Héroes y espantapájaros.

Es posible que el sentimiento piarista tenga uno de sus puntales en la obra de Tavera Acosta Anales de Guayana que,desde su primera edición en 1935, , denuncia la injusticia que se cometió con el fusilamiento de Manuel Piar, pero no quiero desviar la atención del objetivo principal: la opinión y el sentimiento del Guayanés contemporáneo hacia Manuel Piar. Un traidor condenado a muerte que posteriormente fue homenajeado uniendo su nombre a ciudades, avenidas o aeropuertos. Lo que sí podemos indicar como una verdad incuestionable es que a las 5 del tarde del 16 de octubre de 1817, ¡murió el hombre y nació el mito!”. (Hasta aquí la cita del trabajo del Dr. José Carlos Blanco).

Proclama del Libertador

Una vez fusilado el General en jefe Manuel Piar, al día siguiente el Libertador Simón Bolívar dicta una proclama con la finalidad de justificar el fusilamiento ante los miembros del ejército patriótico, la cual se conoce en la historia de la forma siguiente:

¡Soldados! Ayer ha sido un día de dolor para mi corazón. El General Piar fue ejecutado por sus crímenes de lesa patria, conspiración y deserción. Un tribunal justo y legal ha pronunciado la sentencia contra aquel desgraciado ciudadano, que embriagado con los favores de la fortuna, y por saciar su ambición pretendió sepultar la patria entre sus ruinas. El general Piar a la verdad, había hecho servicios importantes a la República y aunque el curso de su conducta había sido siempre el de un faccioso, sus servicios fueron pródigamente recompensados por el Gobierno de Venezuela. “Nada quedaba que desear a un jefe que había obtenido los grados más eminentes de la milicia. La segunda autoridad de la República que se hallaba vacante de hecho, no la disidencia del general Mariño iba hacerle conferida antes de su rebelión; pero este general, que solo aspiraba al mando supremo, formó el designio más atroz que puede concebir una alma perversa. No solo la guerra civil, sino la anarquía y el sacrificio más inhumano de sus propios compañeros y hermanos se había propuesto Piar”

¡Soldados! Vosotros lo sabéis. La igualdad, la libertad y la independencia son nuestra divisa.

¿La humanidad no ha recobrado sus derechos por nuestras leyes?. ¿Nuestras armas no han roto las cadenas de los esclavos? ¿La odiosa diferencia de clases y colores no ha sido abolida para siempre? ¿Los bienes nacionales no se han mandado a repartir entre vosotros? ¿No sois iguales, libres, independientes, felices y honrados? ¿Podría Piar procurarnos mayores bienes? No, no, no. El sepulcro de la República lo abría Piar con sus propias manos para enterrar en él la vida, los bienes y los honores de los bravos defensores de la libertad.

“El cielo ha visto con horror este cruel parricida. El cielo lo entregó a la vindicta de las leyes. El cielo ha permitido que un hombre que ofendía a la divinidad y al linaje humano no profanase más tiempo la tierra que no debía sufrirlo un momento después de su crimen.

¡Soldados! El cielo vela por nuestra salud, y el gobierno que es vuestro padre sólo se desvela por vosotros. Vuestro jefe que es vuestro compañero de armas, y que siempre a vuestros peligros y miserias, como también de vuestros triunfos, confía en vosotros. Confiar pues, en él, seguros de que os ama más que si fuera vuestro padre o vuestro hijo.

Cuartel general de Angostura, octubre 17 de 1817,
Simón Bolívar”.

Por último, para terminar nuestra biografía del general Manuel Piar, expondremos la opinión de la destacada y conocida historiadora venezolana Hildelisa Cabello Requena en un conversatorio con el Dr. Omar Hurtado Rayugsen, sobre destino de los restos del general en jefe Manuel Piar, quien resalta lo siguiente:

“Con pesar debemos señalar que el general en jefe Manuel Piar hoy se sigue presentando ante el común de los venezolanos, incluso de los guayaneses, como un desconocido. Sus orígenes personales y familiares, inclusive su fecha de nacimiento se desconoce, estos datos personales aún no han sido totalmente confirmados y se
mantienen salpicados de dudas y suspicacias; persisten las interrogantes y las opiniones divididas sobre la tierra que lo vio nacer, el vientre y el regazo de la madre que lo trajo al mundo, del padre que lo engendró y protegió de niño. Sobre las causas de su fusilamiento, el episodio más intensamente comentado, y muy posiblemente, más discutido de toda su existencia, no se dispone de ningún estudio realizado con rigor científico, crítico y documentalmente sustentado, concluyente, sobre el tema.

Llama la atención que la relectura de documentos oficiales resguardados en los archivos nacionales desde el siglo XIX, se acrecientan cada día las dudas sobre las acusaciones que se le imputaron y que lo condujeron a una condena a muerte considerada por muchos desproporcionada, injusta e inmerecida; por otra parte, sus restos mortales se mantienen en un limbo, entre la sombra y la oscuridad, entre hipotéticas verdades y la inventiva colectiva; en fin, su historia personal, como pocas figuras de nuestra independencia, está inmersa en una narrativa poco común, confusa, donde se mezclan la historiografía, la crónica, la fábula y el relato.”.(p.48).

Gilberto Bruzual Báez
Profesor Universitario

Referencias y consultas bibliográficas

Biblioteca del Sesquicentenario
(1963)» 150 Años de Vida Republicana». Volumen I y II. Ediciones de la Presidencia de la República. Caracas. Venezuela.

Blanco, José Carlos (2018). “El juicio al General Manuel Piar: Tres Tesis Guayanesas sobre su polémico Proceso Judicial”. Revista Guayana Moderna Nro.7. Año 2018. Ciudad Guayana. Municipio Caroní. Estado Bolívar.

https://revistasenlinea.saber.ucab.edu.ve/index.php/guayanamoderna/article/view/5341

Cabello Requena, Hildelisa (2022)”Manuel Piar. Reivindicación histórica de un prócer”. Conversatorio de la autora con Omar Hurtado Rayugsen. Publicado por el Centro Nacional de Historia de Venezuela en abril de 2022. Caracas. Venezuela.

(https://mail.google.com/mail/u/0/#sent/QgrcJHsBqxpVzFhpgLGczCNpMFvwXrGnnrl?projector=1&messagePartId=0.1).

Donis Ríos, Manuel (1997)”Guayana se adhiere a la causa patriótica”. Artículo.

El UCABISTA, abril 1997. Caracas. Venezuela.

http://w2.ucab.edu.ve/tl_files/sala_de_prensa/recursos/ucabista/abr97/histor.htm

Fernández, Américo(1994) “Historia del Estado Bolívar”. Tomo I. Segunda edición. Editora Boscán C.A. Barquisimeto. Lara. Venezuela

Fernández, Américo
(2006).” Ciudad Bolívar a Grandes Rasgos”. Barquisimeto. Estado Lara. Venezuela.

Fuguet Acosta, Ángel (2004)” Bolívar…Pensamiento y Acción al servicio de la Libertad de Sur América. Ediciones de la Sociedad Bolivariana de Venezuela. Caracas. Venezuela.

Nectario, María(1979). «Guayana». Ferrominera Orinoco CA. Caracas, Venezuela.

Salcedo Bastardo, José Luis (1976).Historia Fundamental de Venezuela. Edición de la Biblioteca. U CV. Caracas. Venezuela.

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.https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/ley-fundamental-de-colombia-1819–0/html/ff6c28b0-82b1-11df-acc7-002185ce6064_2.html

Biografía de Manuel Piar. Fundación empresa Polar

https://bibliofep.fundacionempresaspolar.org/dhv/entradas/p/piar-manuel

( N.1)Solicitud cambio de nombre del estado La Guaira por Estado Piar. Sub Título

El General en Jefe Manuel Carlos Miguel (sic) Piar y Gómez el Mártir de Angostura en 1.817(Octavo párrafo)

https://www.monografias.com/docs110/vida-y-obra-del-general-jefe-manuel-carlos-piar-y-gomez-libertador-guayana/vida-y-obra-del-general-jefe-manuel-carlos-piar-y-gomez-libertador-guayana9

Perú de Lacroix
https://dbe.rah.es/biografias/33056/luis-peru-de-lacroix

https://bibliofep.fundacionempresaspolar.org/dhv/entradas/e/expedicion-de-chacachacare/