Frente a los más de 38 000 palestinos asesinados por parte del ejército israelí, la comunidad internacional continúa repudiando los crímenes de la entidad sionista.
Por: Roberto Chambi Calle, jurista, teólogo y analista en Relaciones Internacionales
Las recientes cifras de la Oficina de Información en Gaza demuestran la brutalidad de Tel Aviv y sus socios, quienes de “querer vengarse”, ahora se han convertido en genocidas, infanticidas y criminales que no respetan a nada ni a nadie, llámese Consejo de Seguridad, Corte Penal Internacional (CPI) o Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Según datos de la oficina de información de Gaza, más de 1500 niños han perdido las extremidades, 17 000 han quedado huérfanos, el 98 % no tienen acceso a agua potable, 3500 padecen enfermedades crónicas, 60 000 fetos se encuentran en el vientre de sus madres expuestos al aborto, 40 000 bebés no han recibido regularmente las vacunas necesarias y 82 000 niños presentan síntomas de desnutrición
Tanto la CIJ o la CPI se han convertido en adornos para hacer creer a la comunidad internacional que la justicia internacional existe, cuando en los hechos¸ ambos tribunales no tienen la solidez para hacer cumplir sus órdenes, así por ejemplo, sus resoluciones han sido desoídas e incumplidas, y no solo desde el 24 de mayo 2024, sino desde hace más de 76 años.
Pese a existir la orden del cese al fuego, Netanyahu continúa su actitud criminal, y no solo contra Gaza sino contra Irak, Siria y el Líbano, este último decidido a ingresar a una guerra total con la entidad sionista. No se debe olvidar que Hezbolá (Partido de Dios) ya ha tenido choques con el ejército israelí el 2006, del cual ha salido victorioso, y hoy continúan destruyendo, cuarteles, personal militar y sitios de entrenamiento israelí. Al respecto el sheij Naim Qasem subsecretario general de Hezbollah, ha sido claro al manifestar que darán una respuesta “contundente” en caso de que el ejército sionista invada el suelo libanés
Las recientes manifestaciones por parte de los israelíes, por la mala “administración de la guerra”, la no liberación de los rehenes, la inseguridad de los territorios colonizados, más la renuncia de Benny Gantz y Gadi Eisenkot al gabinete militar del régimen, demuestran los principios del final de “Bibi” Netanyahu. Y es que en más de ocho meses las fuerzas ocupacionistas no han podido derrotar a la resistencia palestina. La ayuda de los halcones europeos especialmente Alemania y Francia junto a EE.UU. no han tenido la capacidad de derrotar a un pueblo valeroso que ya ofrendó la vida de más de 38 000 palestinos por la defensa de sus tierras, sus recursos, su dignidad y su libertad.
El 24 de mayo pasado, la CIJ ordenó que cesen inmediatamente las hostilidades, al presente Netanyahu y su ejército siguen masacrando a los Gazatíes, todo indica, que si es que se concreta el cese al fuego, será solo una cortina de humo para adquirir más armas, reposicionarse, recuperar a todos los rehenes y continuar con el exterminio; ya que el objetivo inicial desde hace más de 76 años es expulsar a los palestinos y consolidar la colonización definitiva, más aún que el enclave costero tiene reservas de agua dulce y gas, este último recurso descubierto en 1999 por la British Gas (BG) en los campos marinos de Gaza, a 20 millas náuticas de su costa, quien determinó que el campo podría contener hasta 1 billón de pies cúbicos de gas natural.
Asimismo en el 2019 la UNCTAD (Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo) estimó el valor neto de este gas natural marino en Gaza en 4592 millones de dólares, montos que podrían contribuir tranquilamente al desarrollo de los palestinos, y que por este motivo, a la entidad sionista no le conviene que este pueblo tenga la posesión plena de sus territorios y sus recursos como el gas, por ello es que desde el 7 de octubre, el Primer Ministro israelí ha dejado claro que tiene la intención de matar a tantos palestinos como sea posible para presionar a otros a abandonar la Franja de Gaza.
Frente a su sed de criminalidad, el fracaso evidente de “Bibi” Netanyahu, devela la inminente victoria del Eje de la Resistencia y la consolidación de los objetivos de la “Tormenta Al-Aqsa”; la Resistencia palestina hoy sale victoriosa frente a más de siete décadas del asedio sionista en sus territorios ocupados.