por José Ignacio Lula da Silva o simplemente Lula, el dirigente más popular del Brasil por lo menos en los últimos 40 años fue trasladado de Sao Pablo a Curitiba en un pequeño avión (avioneta Cessna monomotor) a la ciudad de Curitiba, vuelo que tardaría 45 minutos en cualquier otra nave jet de la que dispone la Policía Federal de Brasil, se demoró 2 horas en dicha avioneta. Desagradable sorpresa se debe haber llevado Lula al llegar al aeropuerto y ser conducido en la pista para abordar el pequeño avión que lo trasladaría, debió pasarle como un flash por la mente el accidente fatal sufrido por su amigo y colaborador en su gobierno de Eduardo Campos, quien murió en plena campaña electoral al caer el avión Cessna 560XL que lo trasladaba, en una zona poblada de Sao Pablo, accidente en circunstancias muy extrañas, las primeras declaraciones oficiales hablaban de un helicóptero y luego se refirieron al avión, Campos ocupaba según las encuestas la tercera opción y su compañera de fórmula era Marina Silva, había la certeza de que Eduardo Campos apoyaría a Dilma para la segunda vuelta o ballotage, no así Marina Silva quien sustituyó a Campos y como ya se sabía no apoyo a Dilma, esto comprometió el triunfo de Rousseff, aunque ganó, lo hizo por poca diferencia ante el candidato de la oligarquía brasileña Aécio Neves da Cunha. También debe haber pasado por su mente como relámpago el extraño accidente aéreo donde perdió la vida Jaime Roldós Aguilera, presidente en funciones del Ecuador, quizá recordó el sospechoso accidente fatal en un helicóptero de Omar Torrijos, presidente en funciones de Panamá. Seguramente no recordó las inexplicables circunstancias delaccidente fatal en avioneta que sufrió el candidato a la presidencia de Venezuela Renny Ottolina quien se perfilaba como un candidato también de la oligarquía pero amenazaba la hegemonía de Acción Democrática.
No hay explicación razonable para justificar el uso de esa pequeña nave, lenta y de muchas horas de vuelo para trasladar al principal líder popular de Brasil y dos veces presidente, al final damos un inventario parcial conocido de las naves aéreas disponibles por la Policía Federal de Brasil.
La explicación está no en el campo técnico o material sino en el psicológico. A ver:
Se trata de una manipulación para crear zozobra, temor y desprecio hacia un líder de la talla de Lula, es como decirle: te podemos matar cuando nos dé la gana, también: un tornero como tú no puede aspirar más que trasladarlo en esta pequeña nave o ¿quién te crees tú?, no eres más que un obrero metalmecánico.
La élite fascista y criminal del Brasil también es perversa como todo fascista.
#LULALIVRE
Lista parcial de aeronaves al servicio de la Policía Federal:
3 Boeing 727-200, 1 Boeing 727 cargo, 2 Casa Cn235, 1 Dassault Falcon 20, 1 Gulfstream II, 1 Gulfstream IV, 1 Learjet 45, 1 Cessna 182, 1 Sicocsky UH60, 3 helicópteros MI-17, 1 DC-8, 1 monomotor Cessna.